La actividad en la secretaría técnica del Betis es frenética. Y no sólo porque queden cinco días para que el mercado invernal eche el cierre. Pepe Mel ha dejado claro, tanto en público como en privado, que necesita refuerzos de aquí al jueves, ya que las lesiones están mermando considerablemente las prestaciones de su equipo, aunque lo cierto es que Vlada Stosic y su equipo también trabajan pensando en el próximo verano. Entonces, el grupo sufrirá una profunda remodelación, especialmente acusada en algunas posiciones, por lo que toda gestión que pueda adelantarse será bienvenida en Heliópolis.
Según ha podido saber ED, determinados seguimientos a jugadores han entrado en la fase decisiva, por lo que los elegidos estarían a pocos días de ser catalogados como interesantes o no para el proyecto hispalense. Es el caso del pivote Manuel Iturra, que termina contrato el 30 de junio y que, como otros en idéntica tesitura, se han convertido en objeto de deseo de los clubes menos pudientes.
Este periódico, de hecho, ya informó del interés bético por el espanyolista Baena y el posicionamiento estratégico en la subasta por el levantinista Iborra. El pasado jueves, un técnico verdiblanco presenció en directo el Málaga-Barça de la Copa y tomó buena nota de las evoluciones del chileno, que disputó los noventa minutos a buen nivel. Cedido el curso pasado por el Universidad de Chile en el Murcia, es una apuesta personal de su compatriota Pellegrini, por lo que, si el míster insiste en su continuidad, lo más probable es que renueve. Eso afirma el entorno de Iturra, quien, con todo, está recibiendo y estudiando ofrecimientos variopintos.
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