Ceballos: una renovación en la que Mel tiene mucho que decir

Beñat, Álex Martínez, Nono, Vadillo, Pozuelo, Sergio Rodríguez, Adrián, Manu Palancar, Razak, Fran No, Ezequiel, Miki Roqué o Eder Vilarchao son algunos de los 16 canteranos que debutaron con la camiseta del Betis de la mano del entrenador pródigo, Pepe Mel. Si bien es cierto que muchos de ellos tuvieron un papel testimonial, otros tantos se convirtieron en piezas fundamentales de su esquema. El madrileño tuvo la valentía -también la necesidad- de apoyarse en una cantera que ofreció su mejor hornada en años, coincidiendo con el anterior descenso de categoría.


Ahora, el Betis se encuentra en una situación -salvando las distancias- parecida. La obligación de subir y las limitaciones económicas se mantienen, pero también la calidad del producto autóctono. El mayor exponente es, sin duda, Dani Ceballos, el centrocampista utrerano de 18 años que hace apenas unas semanas jugaba en el filial y ahora parece innegociable en las alineaciones del primer equipo.


Su continuidad a las órdenes de Pepe Mel, sin embargo, podría verse empañada por las conversaciones que ya han comenzado entre el club y el jugador para la adecuación de su contrato. Desde la dirección deportiva se tiene la firme intención de renovar a una de las perlas más prometedoras de su camada, pero, de momento, las conversaciones se encuentran en ‘stand by’.


El canterano ha cambiado hace unos días de agente, y hasta que no se formalice el ‘traspaso de poderes’ de su anterior representante a la agencia que le va a llevar sus asuntos a partir de ahora, la negociación seguirá sin avanzar. En cualquier caso, tendrán que ser sus nuevos apoderados (curiosamente, los mismos que llevan los asuntos de Pepe Mel, Bahía Internacional) los que estudien los términos de la propuesta heliopolitana.


No se descarta que Mel, consciente del talento del futbolista, apriete en ambas direcciones para que el acuerdo se alcance lo antes posible y, de este modo, poder contar con Dani Ceballos a todos los efectos como miembro de pleno derecho de la primera plantilla, con un contrato acorde a las prestaciones que ya ha demostrado.