Cuando un equipo registra once altas en un mercado de fichajes siempre hay dudas acerca del rendimiento que puede ofrecer en el corto plazo. En el
Betis, Mel ha conseguido que buena parte de los fichajes que le trajo
Macià brillen en poco tiempo. La conjunción de los nuevos con el bloque que ascendió desde Segunda es una de las claves del buen arranque verdiblanco.
Como es normal, no todos los que llegaron al Betis en verano están ofreciendo ya un buen nivel, pero por el momento destacan más las luces que las sombras en la planificación deportiva verdiblanca.
Joaquín y
Westermann son los abanderados de las incorporaciones. El gaditano no ha defraudado en su vuelta. Es uno de los ídolos de la afición y ya suma un gol y una asistencia en cinco compromisos oficiales. Desde el momento de su llegada es imprescindible para
Pepe Mel y un factor diferencial de la escuadra heliopolitana. Junto a él,
Westermann ejemplifica la adaptación de los fichajes. El alemán ha cumplido desde el primer día y en su último compromiso, ante el Rayo en Vallecas, cuajó un partido redondo coronado con una de las mejores dianas de lo que va de temporada. Su dupla con Bruno es una de las mejores noticias de estas siete primeras jornadas de Liga.
En el plano positivo también destaca el paso al frente dado por dos jugadores que ya pertenecían a la entidad la temporada pasada,
Piccini y
Portillo. El italiano, que apenas pudo jugar la campaña anterior por una serie de incómodas lesiones, ha comenzado como un tiro. Es uno de los motores del Betis gracias a su recorrido por la banda y está dando la razón tanto a
Mel como a
Macià, que después de una temporada dubitativa decidieron acometer la compra de los derechos federativos del lateral transalpino. Portillo también está respondiendo a la confianza del entrenador, sobre todo teniendo en cuenta que Ceballos no ha comenzado el curso de la mejor de las maneras posibles.
En un segundo escalón de rendimiento se encuentran dos jugadores que sin hacer demasiado ruido están respondiendo. Petros acumula ya cinco comparecencias en las que ha sabido llevar el timón junto a
N´Diaye. Por su parte, Vargas sólo se ha visto frenado por una lesión después de convencer en sus primeros cinco partidos.
LesionesEl resto de incorporaciones, a excepción de
Tarek, que no cuenta para Mel, se ha visto afectado por las lesiones. Al margen de esto, la decepción hasta la fecha es
Van der Vaart, que únicamente ha podido jugar un partido desde que llegó, mientras que
Van Wolfswinkel apenas ha jugado media hora.
Pezzella, que gustó en pretemporada, ha evidenciado que necesita cuajo, mientras que
Digard debe ser importante cuando vuelva la competición tras superar sus problemas físicos. Kadir también fue comprado, pero nunca contó.