Kadir: "A día de hoy no puedo decir por qué estuve apartado"

Foued Kadir es, probablemente, el jugador que más ha agradecido la llegada de Merino. "Puedo decir eso", confiesa, tras pasar uno de los peores momentos de su carrera por el ostracismo al que le condenó Pepe Mel, aunque casi tanto como lo que califica una "sinrazón" le dolió no recibir una explicación por parte del técnico. Hoy disfruta lo que puede en un Betis con el que espera vivir un final de temporada tranquilo.

- Hace un año le entrevistaba y vivía un buen momento, parecido al actual, pero en medio le han sucedido muchas cosas y no precisamente agradables.
- Sí. He pasado momentos difíciles. Creo que me ha pasado lo peor que le puede pasar a un futbolista, que es estar apartado y, además, sin razón. Pero bueno, todo eso es pasado, ahora hay que mirar adelante. Estoy volviendo a coger el ritmo, a estar al cien por cien. Estoy contento por jugar de nuevo.

- Probablemente sea el jugador que más ha agradecido el cambio de entrenador y el regreso de Juan Merino.
- Sí y puedo decirlo. No estaba contento antes de que llegara y todo ha cambiado para mí con su regreso.

- Ya en su corta etapa del año pasado confió mucho en usted.
- Sí. Y ahora también. Tiene mucho confianza en mí y yo intento darlo todo en el campo para devolverle esa confianza. Espero que todo salga bien y que siga así hasta el final de la temporada.

- Ha jugado tras seis meses sin hacerlo, ¿cómo le ha afectado en lo físico?
- Vuelvo a estar a tope poco a poco. Es difícil pasar de no jugar nada en seis meses a hacerlo. Además ya no tengo 20 años (ríe). Sí que he trabajado duro estos seis meses, no he bajado los brazos para volver a jugar y estar preparado. Estoy bien. Me siento bien.

- La opción de jugar otra vez con el Betis ha sido gracias a su cabezonería porque le han abierto la puerta varias veces.
- Sí. Pero yo vine al Betis para jugar en Primera división. Firmé en Segunda porque sabía que íbamos a subir y podría jugar en Primera porque no me considero un jugador de Segunda. Al final pasó lo que pasó. Pude salir en verano, pero pensé sinceramente que las cosas iban a cambiar por lo que demuestro cada día en los entrenamientos, pero no cambió con Pepe Mel. En fin, el destino es así.

- ¿Le pasó algo con Mel para que dejara de jugar de repente? ¿Se lo explicó?
- No me pasó nada, ni me explicaron nada, y eso es lo que me molestó mucho. Todo era sin razón. A día de hoy no puedo decir por qué estuve apartado.

- ¿Cómo afronta un futbolista esa situación? ¿Le había pasado antes?
- Es lo peor que le puede pasar a un futbolista. Ya me había pasado en el Marsella, pero fue una situación totalmente diferente.

- ¿Nadie en el Betis le dio explicaciones?
- Eduardo Macià sí me explicó antes de la pretemporada que tenía que buscar una salida. Entendí que era una sinrazón y decidí seguir. Pero es pasado; ahora quiero seguir adelante.

- ¿En quién ha encontrado más apoyo este tiempo?
- Sobre todo en la familia. Eso es lo más importante. Y también en el vestuario, todos los compañeros se han portado bien con los jugadores que estuvimos apartados. Conmigo especialmente Alfred, también Rennella o Didier porque son franceses, pero toda la plantilla nos ha apoyado mucho.

- Parte de la afición tampoco entendió ese ostracismo, ¿ha notado eso?
- Yo soy un jugador que lo da todo en el campo. Los partidos pueden salir bien o mal, pero siempre hay que darlo todo. Creo que a la afición le gusta eso.

- Es que durante mucho tiempo se ha buscado un perfil como el suyo.
- El fútbol es así. Cuando un entrenador no cuenta con un jugador lo normal es que se busque otro para esa posición. Yo no lo único que hice fue no parar de trabajar para volver.

- Bueno. Se va Mel, dejamos eso atrás, y llega Juan Merino y en el partido contra el Villarreal decide entregarle la camiseta.
- Reconozco que a mí también me sorprendió al principio porque poner a un jugador así directamente después de seis meses sin jugar podía ser raro. Pero, como he dicho, durante esos seis meses he seguido trabajando fuerte, más de lo normal para tener un mínimo de ritmo y todo fue bien.

- ¿Cómo es su relación con Merino?
- Es buena. A él le gustan los jugadores que se esfuerzan, que juegan para el equipo. Es el entrenador que nos hacía falta.

- ¿En qué ha cambiado el equipo?
- Creo que con Merino todo el mundo trabaja más en los entrenamientos y en los partidos. En la situación que tenemos eso es importante. Estamos en una zona peligrosa y tenemos que salir de ahí cuanto antes. Eso sólo lo podemos hacer estando juntos, trabajando ofensiva y defensivamente.

- Imagino que orgulloso por haber podido demostrar qué clase de jugador es en la Liga.
- Sí, lo estoy. Yo sabía qué clase de jugador soy y que soy un jugador de Primera. Estaba enfadado por no poder demostrarlo. Tenía esa rabia interior. Ver los partidos en la grada no es fácil, uno no está bien. Cuando estás en la grada sólo piensas en ayudar a los compañeros. Cuando ganan quieres disfrutar con ellos, jugar y aprovechar el momento y cuando el momento es malo quieres estar ahí para sacarlo adelante.

- Ha dicho que se sabía jugador de Primera, ¿cómo se vio en sus primeros partidos?
- Obviamente es diferente a Segunda. Se nota en el juego. Es mucho más rápido. Los jugadores tienen más calidad técnica.