El partido entre el Espanyol y el Betis de este jueves está en serio riesgo de suspenderse a esta hora después de que Antonio Turmo, jefe de los servicios médicos del Espanyol, haya confirmado que hasta ocho jugadores del primer equipo se encuentran afectados de un brote de gastroenteritis, aunque sospecha que el número puede elevarse en las próximas horas a pesar del esfuerzo por aislar al resto de jugadores.
El responsable médico del club ha reconocido que se trata de "un brote muy agudo, autolimitado en el tiempo", del que esperan que "sea leve", aunque "no a todos les afecta por igual", y también ha precisado en rueda de prensa: "La transmisión está siendo muy rápida. El origen parece vírico, altamente contagioso, y ya estamos cogiendo muestras para hacer cultivos y tener más información. No parece que sea de origen alimentario pero tampoco se puede descartar".
El doctor Turmo ha reconocido asimismo que "no es lo ideal afrontar un partido en estas condiciones en las próximas 48 horas porque estos cuadros siempre acaban afectado el rendimiento de los deportistas". "De todas formas, nuestra confianza es que no aparezcan más casos, pero no podemos asegurarlo", comentó Turmo.
El club perico no descarta pedir un aplazamiento del partido por considerar que no están en condiciones de afrontar el encuentro ante el Betis este jueves.
Los futbolistas del Espanyol Burgui, Marco Asensio, Abraham González, Víctor Sánchez, Hernán Pérez, Gerard Moreno, Álvaro González y Víctor Álvarez son, de momento, los afectados.
Isabel Morales2 min lectura