Uno de los puntos fuertes de la candidatura de
´Ahora, Betis, ahora´ en las dos últimas asambleas, cuando recabaron el apoyo de una minoría simple pero suficiente del accionariado verdiblanco, era la demolición y construcción del Gol Sur para cerrar el
Estadio Benito Villamarín por arriba, una obra que supondrá un desembolso de entre 15 y 17 millones de euros, cantidad que se financiaría en gran parte con aportaciones de empresas que se beneficiarían de la explotación de unos bajos comerciales, además de otras posibles iniciativas. José
Miguel López Catalán apuntaba este lunes en
'Canal Sur Radio' que el proyecto, lejos de retrasarse, cumple con los plazos.
"No es nada fácil; estamos trabajando a destajo para empezar el 1 de junio y cubrir unos seis meses de construcción sin tener que irnos al Olímpico. La intención es reubicar a los béticos en otras zonas del estadio. Para enero o febrero de 2017, querríamos tenerlo terminado. Llegaríamos a unos 60.000 espectadores más o menos. Estamos trabajando con varias alternativas de financiación con empresas que pueden aportar dinero para la construcción de la grada, utilizando también parte de los ingresos añadidos que vamos a tener por la televisión.
De todas formas, cualquier disposición que realicemos no afectará a la partida presupuestaria destinada a la plantilla, que sigue siendo nuestra principal obsesión. Este tipo de proyectos necesitan su tiempo. Las prisas no son buenas consejeras", afirmaba el consejero delegado.