El mercado obliga a no dormirse con Van der Vaart... ni N'Diaye

Este viernes 26 de febrero se cierra el plazo de fichajes en China, una amenaza y un bálsamo a partes iguales para un Betis que teme que le quiten a una pieza indispensable en sus esquemas, Alfred N’Diaye, pero que también espera colocar allí a uno de sus descartes, Rafael van der Vaart, ya que únicamente en torneos exóticos como aquél podrían asumir los elevados emolumentos del ex del Hamburgo. Por esta razón, en la planta noble del Benito Villamarín mirarán de reojo los movimientos postreros en la Chinese Super League, aunque están más o menos tranquilos respecto al parisino, por el que se rechazaron sendas propuestas, la mayor de once millones de euros, si bien siempre existe la posibilidad de que se abone su cláusula, solamente algo más elevada.

En lo que se refiere al mediapunta holandés, las opciones de que acepte cambiar de aires no son muchas. Su familia está en Alemania, por lo que no está por la labor de marcharse de Europa, aunque en el Betis lo presionan para que libere a la entidad de las dos temporadas más que tiene de contrato, con una de las mayores fichas de la plantilla. China no parece estar entre sus preferencias, si bien existen otras Ligas con el mercado aún abierto que podrían albergar al otrora madridista. Por ejemplo, este viernes expira el plazo en Rusia, una semana antes de que lo haga en Ucrania.

Hasta el 20 de abril hay margen en Brasil, mientras que el ‘deadline’ en la Major League Soccer estadounidense, como en su homóloga canadiense, se pospone hasta el 11 de mayo próximo. Es de lo poco atractivo que resta para Van der Vaart, que tampoco era partidario de marcharse a Oriente Medio (como Turquía, por una cuestión de seguridad, no ya monetaria). En cualquier caso, el pasado 15 de febrero terminó el plazo en Emiratos Árabes, igual que en otra competición con poderío financiero como la de India.

Finalmente, en Qatar o Bahréin se cuadraron las fechas con los países europeos, de tal manera que sus mercados echaron el pestillo en las postrimerías del mes de enero, prácticamente una quincena después que lo hicieran en Arabia Saudí.