El único
fichaje confirmado por el
Betis para la temporada
2016/2017 se resiste a poner fin a su temporada, aunque, a tenor de lo que está exhibiendo en esta recta final, parece tener cuerda para rato. Y es que
Riza Durmisi puede disputar cuatro partidos en trece días, con dos largos viajes de ida y vuelta incluidos entre los supuestos descansos. De esta forma, el lateral zurdo fue titular el pasado jueves 26 de mayo en el 0-2 del
Brondby en la cancha
Hobro, desplazándose nada más terminar esa tarde-noche a
Copenhague para tomar la mañana siguiente un avión a Málaga y enlazar por carretera hasta
Sevilla, donde pasó reconocimiento con el
Betis y hubo de pernoctar hasta que su hasta entonces club mandara por fax la confirmación. El sábado 28 a mediodía, el danés emprendió el regreso a su país para despedirse poco más de veinticuatro horas después de la afición del club que lo ha formado en los últimos doce años, tras lo que puso fin a la
Alka Superligaen, pero no a su curso. Le esperaba la selección.
En este sentido, el ya verdiblanco ha sido uno de los expedicionarios del combinado nórdico para participar en la Copa
Kirin, un torneo que se celebra en
Japón cada cierto tiempo -la última edición data de 2014, aunque había transcurrido un lustro sin este formato-. Ayer, en el Toyota Stadium de
Aichi, volvió a partir de inicio ante
Bosnia-Herzegovina con el dorsal 5 (como carrilero izquierdo en un 1-3-4-1-2) en el equipo dispuesto por
Aage Hareide, en lo que era su décimo encuentro (los nueve últimos como titular) representando a la nación en la que ha nacido y se ha criado, si bien su familia tiene ascendencia albanesa y macedonia. Durmisi vio una cartulina amarilla en el minuto 75 y fue sustituido once más tarde por
Ankersen, no sin antes haber participado activamente en los dos tantos daneses.
Primero, hizo la pared con Eriksen en el lanzamiento en corto de un córner que, previo despeje del meta balcánico Sehic, empujó a la red Kjaer en el 22; luego, a cuatro del descanso, penetró por su carril hasta el área contraria y sirvió un centro que no pudo aprovechar Duncan en boca de gol, pero que Fischer acabaría convirtiendo en el 2-0. No obstante,
Dinamarca se vino abajo en la reanudación y se dejó empatar con un doblete de Milan Juric (minutos 52 y 84), cayendo finalmente por 3-4 en la tanda de penaltis, por lo que queda fuera de la lucha por el título del torneo, que
Bosnia dirimirá ante la anfitriona, Japón, que ganó su semifinal por un contundente 7-2.
Antes de dar carpetazo a su temporada,
Durmisi podría jugar su quinto partido en dieciséis días. Será el próximo martes 7 de junio (09:00, hora española) ante
Bulgaria por el tercer y cuarto puestos en el Suita City Football Stadium de Osaka. Luego, largo viaje de vuelta a
Copenhague y otro a
España ese mismo domingo para presentarse con el Betis seguramente el lunes 11.