El RCD
Espanyol ha informado este martes de la existencia de un
brote de gastroenteritis en la primera plantilla blanquiazul que afecta ya hasta ocho jugadores, que no se han podido entrenar y que están en sus domicilios, y que son
seria duda para la visita este jueves del
Real Betis, en una jornada de Liga que es clave en la lucha por evitar el descenso al estar empatados a 28 puntos.
Tras
Víctor Álvarez, que este lunes fue el primero en presentar los síntomas, este martes han sido
Víctor Sánchez, Burgui, Asensio, Hernán Pérez, Gerard Moreno, Álvaro González y Abraham los que tras someterse a una revisión que se les ha hecho en la Ciudad Deportiva Dani Jarque a primera hora de la han tenido que irse a casa por este brote de gastroenteritis.
"Los siete han tenido que regresar a sus domicilios y habrá que esperar a ver cómo reaccionarán en las próximas horas. A unas 48 horas para el inicio partido del jueves ante el Betis, el club irá informando puntualmente de la evolución de este proceso", señaló el club en un comunicado.
Dado que el partido es como una 'final', al estar ambos equipos igualados a 28 puntos y a 4 puntos actualmente del descenso, de confirmarse estos siete casos de gastroenteritis y ser baja los afectados el técnico,
Constantin Galca, tendría serios problemas para confeccionar un once inicial similar al que es más habitual.
Y es que, pese al regreso tras sanción de
Felipe Caicedo, el entrenador se quedaría sin Burgui ni Gerard Moreno -autores de tres de los goles del triunfo en Gijón (2-4)- además de sin el oxígeno en el centro del campo de Víctor Sánchez y Abraham, sin la magia creativa de un inspirado Marco Asensio y sin la velocidad y desequilibrio en el extremo de Hernán Pérez.