El Betis vence al Everton en penaltis (4-3) y sigue invicto

Examen para sacar nota el que tenía hoy el Real Betis ante el Everton, la mayor piedra de toque hasta ahora esta pretemporada. Después de vencer a El Palo, Linense, Middlesbrough, Fulham y Werder Bremen, los verdiblancos podían seguir engordando su casillero de victorias ante un rival de enjundia como el Everton de la Premier League inglesa.

Tras jugar ayer ante el Werder Bremen con un once repleto de suplentes y canteranos, Poyet ha puesto hoy sobre el césped del Stadion Dresden a gran parte de los teóricos titulares. Adán, Piccini, Pezzella, Mandi, Durmisi, Petros, Jonas, Felipe Gutiérrez, Cejudo, Joaquín y Rubén Castro. Un equipo del que se ha podido ver cosas interesantes en algunos de los fichajes como Durmisi y cosas preocupantes en veteranos asentados como Antonio Adán. Tal vez, la entrada de Musonda por Cejudo definiría el equipo base de Poyet para la temporada.
Arrancó fuerte el Betis con una jugada por banda derecha que remató Rubén Castro, quien acabó pidiendo penalti tras golpear el balón en un rival. Desde ahí, los heliopolitanos fueron a menos.

El peligro de la primera mitad estuvo en las jugadas a balón parado. Adán sembró muchas dudas en los balones aéreos y así fue como llegó el tanto del Everton, que encontró en su banda derecha su mayor arma. Un saque de esquina botado desde la izquierda acabó con una salida en falso de Adán y el balón golpeando en la rodilla de Mandi, quien anotó el 0-1 para el Everton antes del cuarto de hora de partido.

No tardó mucho en empatar el Betis. Pezzella cazó un balón suelto en el área tras una falta lateral muy bien sacada por Durmisi y colocó las tablas en el marcador.

El Everton tuvo alguna ocasión para adelantarse antes del descanso, todos generadas por centros laterales o jugadas a balón parado.
Tras la reanudación, el Betis parecía con ganas de ir a por el partido. Joaquín se mostró más activo y dispuso de un par de ocasiones. No así Rubén Castro, que estuvo desaparecido todo el encuentro. Pese a los intentos del Betis, Joel Robles no sufría en exceso. Tampoco lo hacía Adán, que solo tuvo que intervenir en un par de disparos desde la frontal. Con empate a uno se llegó al final de los 90’ y los 11 metros acapararon todo el protagonismo.

Adán enmendó su partido durante la tanda de penaltis, en la que paró los primeros dos lanzamientos de los ingleses. Musonda transformó el penalti definitivo y dio la victoria a los verdiblancos por 3-4, que siguen invictos esta pretemporada.