Los béticos se llevan la Copa Ibérica

Sporting 2-3 Betis: Rubén Castro y su voracidad infinita

Sporting 2-3 Betis: Rubén Castro y su voracidad infinita
Los béticos celebran la victoria en la Copa Ibérica - J.M. Zapata
Javier Muñoz ZapataJavier Muñoz Zapata5 min lectura
Otro duelo de altura que se le presentaba al Real Betis en este séptimo encuentro de pretemporada, en el que tenía la clara intención de seguir invicto y hacerse con la sexta victoria de la preparación tras el empate a un gol contra el Everton, al que le ganó en los penaltis.
Tras la llegada de Zozulya, por primera vez contaba Gustavo Poyet con cuatro delanteros en sus filas, a los cuales, además, convocó para el encuentro. Aprovechando esta circunstancia, el técnico uruguayo situó a dos de inicio, a Rubén Castro y a Tonny Sanabria, dos delanteros puros que, a la postre, dieron señas de gran entendimiento sobre el verde. Cambios tácticos que al principio no parecían cuajar por la falta de entendimiento entre los verdiblancos. De hecho, era el Sporting, que este año disputará la Champions League, quien imponía su juego. En uno de esos desajustes, Bryan Ruiz se fue con clase de Durmisi con un recorte y la puso entre Giménez y la defensa, donde apareció Alan Ruiz para adelantar a los 'leones' en el minuto 17 de la contienda, mientras se veía a Poyet preocupado en el banquillo visitante.

A pesar del tanto encajado, los heliopolitanos no eran capaces de reaccionar. Ceballos, voluntarioso, destacaba por su trabajo y brega en el centro del campo. Y el utrerano, en un destello de su calidad, le metió un balón profundo a Sanabria, quien lo alcanzó en la banda, levantó la mirada y se la puso a Rubén en la cabeza. En el 28´ el canario acortaba distancias en el marcador. Y ahí no quedó la cosa, pues tan sólo un par de minutos después el '24' volvía a perforar la meta de Rui Patricio. Esta vez fue Jonas Martin quien, dando un pase a la espalda de la zaga lisboeta, encontró a un Rubén que quebró con facilidad al defensa y golpeó con la derecha. Le daba la vuelta al luminoso el cuadro verdiblanco, ayer de amarillo fluorescente, y tomaba, a raíz de los dos goles, el control del encuentro a base de tantos.

Llegaba así el Betis al descanso, tras remontar el partido y dando una mejor versión que la inicial, algo que esperaba mantener tras el tiempo de descanso. Ya en la segunda mitad, el Betis introdujo el primer cambio, y Ceballos le dejaba su sitio a Gutiérrez. Y siguió la misma tónica, con los visitantes con un juego alegre e intenso. Con el carrusel de cambios, se esperaba que el ritmo disminuyera, pero no fue así, al contrario. Después de alguna llegada aislada de los lisboetas, volvió a aparecer Rubén, quien se movió a la perfección entre los defensas lusos. El canario recibió un pase a la espalda de la línea defensiva y se la cedió a Sanabria quien, se la devolvió al canario después de recibir el rechace de su propio taconazo, rubricando el isleño el 'hat-trick' perfecto y el inicio de una gran relación de entendimiento entre ambos. Tras ello siguieron los cambios, produciéndose el debut de Zozulya y Manu Herrera, quien, como Giménez, encajó un tanto. Slimani, en el 75´, se adelantó a Pezzella en un saque de falta y batió al madrileño. A partir de ahí, el Betis resistió las arrancadas de los portugueses, quienes se quedaron protestando un posible penalti tras el pitido final, cuando los hispalenses ya tenían en su poder la Copa Ibérica, la cual han conseguido después de tres participaciones. De esta manera, sexta victoria en siete partidos e imbatibilidad verdiblanca en la preparación.
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