El
Real Betis iniciará el próximo viernes ante el
Granada su particular '
Tourmalet' de partidos de máxima rivalidad regional, que tendrá su punto culminante en el derbi por antonomasia que disputará el martes 20 de septiembre ante el
Sevilla en el
Sánchez-Pizjuán y que ya ha sido bautizado como '
ElGranDerbi'.
La etiqueta en 'tuiter' de 'gran derbi' ha partido desde el
Sevilla para destacar la importancia del partido frente a los verdiblancos, que, tras su victoria en
Valencia el pasado domingo por 2-3, emprenden una serie de partidos clave en el espacio de una semana frente al
Granada, el eterno rival sevillista y el
Málaga.
Los de
Gustavo Poyet tendrán que refrendar ante los granadinistas de
Paco Jémez el buen resultado de Valencia para consolidarse en la clasificación, corroborar las buenas sensaciones y disipar las dudas suscitadas en el comienzo de la temporada y las generadas en
Mestalla al dejarse empatar un partido que iba ganando por 0-2 y en el que se impuso sobre la bocina.
El
Benito Villamarín será el escenario de este primer duelo de máxima rivalidad regional y lo hará ante un equipo completamente renovado y que, hasta el momento, sólo ha cosechado un empate que lo tiene clasificado en la zona baja de la clasificación.
Sin embargo, la cita estelar del
Betis y del fútbol sevillano será cuatro días más tarde en el estadio
Ramón Sánchez-Pizjuán ante el
Sevilla entrenado por el argentino
Jorge Sampaoli, que vendrá de disputar su primer partido de
Liga de
Campeones ante la
Juventus de
Turín y, el próximo sábado, el de
Liga ante el
Éibar en
Ipurúa.
El
Sevilla ha empezado
LaLiga con las lógicas dudas de un nuevo proyecto deportivo, aunque hasta el momento los resultados han propiciado que los de
Sampaoli estén invictos y segundos en la clasificación con siete puntos.
Pese a los resultados previos y el puesto que ocupen ambos en la clasificación, un
Sevilla-
Betis es siempre muchos más por la rivalidad entre ambos, la 'guasa' de las dos orillas de la ciudad y lo que el resultado puede determinar en el estado anímico de los jugadores hasta que vuelvan a encontrarse en la segunda vuelta.
Sin casi tiempo para digerir el resultado, el
Betis jugará el viernes en el
Benito Villamarín ante el
Málaga de
Juande Ramos su segundo partido en este día en el que, siete días más tarde y en
San Sebastián, repetirá en
Anoeta con la
Real Sociedad.
Los malagueños están completando también un irregular inicio de temporada en el que han cosechado dos empates que lo tienen en el puesto 16 de la clasificación, uno por encima del
Granada.
Por tanto, los de
Gustavo Poyet jugarán tres partidos en siete días en los que no tendrá que moverse de
Sevilla, dos en el
Benito Villamarín y uno en el
Ramón Sánchez-Pizjuán, y en el que el único ahorro que se podrán permitir los verdiblancos ante tanta exigencia deportiva será en viajes.