Álex Alegría: "Firmaré el contrato sin leerlo"

Álex Alegría se fijaba en Ibrahimovic y Fernando Llorente. Eran sus referentes mientras subía escalones en una trayectoria en la que nadie le ha regalado nada y que, curiosamente, comenzó en la portería, aunque pronto se dio cuenta de que prefería marcar goles en vez de evitarlos. Ahora, tras mucho trabajo, ha llegado a la elite y ha arrancado con intención de consolidarse en un Betis con el que, tal y como afirmó en los medios oficiales, renovará sin pensárselo cuanto antes.

- Su inicio de temporada ha sorprendido a propios y extraños, quizás por lo inesperado.
- Mejor aparecer sin que se le espere a uno y sorprender que prometer mucho y no hacer nada. Estoy bien; sólo un poco cansado, pero es normal. Desde que empecé en Segunda B con el Cacereño, todos los partidos han sido de lucha. Por mi juego, tiene que ser así casi siempre.

- ¿Cómo empezó todo?
- Fue por casualidad cuando me apunté al primer equipo de fútbol. Siempre estaba con mi hermano jugando en la calle, a veces con chicos 7-8 años mayores que yo. Me ponían de portero para no hacerme daño, pero un día pasé por un pabellón y le dije a mi madre que me apuntara. Duré un mes, porque me aburría de portero, que es lo que necesitaban en el equipo. Luego fui central, y así fui subiendo de posición. El salto a delantero lo di en el San Miguel, de mi barrio, en infantiles, pasando al Plasencia. Siempre he hecho goles, la verdad. Cuando me ficha el Betis, no era el único club interesado, pero me decido por la apuesta que se hace aquí por la cantera.

- Está en su mejor momento...
- La confianza me permite crecer mucho. Normalmente, te centras en hacer lo básico, pero, con confianza, te atreves a hacer más cosas. También es más fácil con Rubén al lado. Cada día que pasa me sorprende más, porque te lo hace todo mucho más fácil. Si haces el desmarque, siempre está muy bien ubicado. Si no marca él, te da, como ante el Granada. Él se complementa con los que vamos bien de espaldas, porque puede aprovechar los espacios que generamos. El segundo gol sorprendió a muchos, pero no a los que me conocen, porque también me muevo bien con los pies, no sólo por alto.

- El día que firmó fue algo tenso, ¿cómo lo recuerda?
- Vine a las 11:00 h y no firmé hasta las 20:00 h, porque el Cacereño no se terminaba de poner de acuerdo con el Betis. Era un paso muy importante para mí entrar en una cantera de un club de Primera. Fueron horas tensas.

- ¿Cuál es su valoración sobre su cesión en Soria?
- Maduré deportivamente, lo que fue muy importante. Fui a un club muy familiar. Nos tomamos mi representante y yo el tema con cuidado. Sabía que, cuando llegara mi oportunidad, demostraría lo que valía. Todos los años desde que llegué a Segunda B empecé como suplente, pero acabé siendo titular y marcando goles. Toda la vida me ha costado mucho, he tenido que trabajar bastante para llegar aquí. Fue un sueño escuchar a todo el campo coreando mi nombre; casi se me saltan las lágrimas. Valió la pena todo el esfuerzo de estos años para vivir ese momento.

- Gustavo Poyet ha confiado en usted desde el primer momento.
- Todo esto se lo debo a él. Está todo el día encima, enseñándome cosas de delantero. Su confianza me está ayudando a mejorar en todos los aspectos. Está viendo que lo estoy dando todo por el equipo y me alegra que el míster me venda así de bien. Si un jugador le da rendimiento y lo deja todo en el campo, le da igual que sea joven o mayor. No se casa con nadie. Sabía que, con minutos, cogería peso en el equipo y me iba a sentir más importante. Me insisten en que no me lo crea, pero yo soy así, nunca me relajo, así que seguiré trabajando hasta los 35 años, si tengo el gusto y la oportunidad de llegar a esa edad en Primera, como Rubén y Joaquín, que son unos cracks a los que veía por la tele hace años. Por eso estoy algo más cortado de momento en el vestuario, aunque ya me iré soltando.

- ¿Cómo marcha la renovación?
- Van muy bien las cosas, la verdad. En cuanto vengan con el contrato, lo firmo directamente. No me hace falta leerlo (risas). Lo hemos hablado por encima y, como estoy muy a gusto en este club con todos, por qué me voy a ir a otro. Que sea lo más pronto posible. ¿Hecho? Si me la ofrecen, firmaré sin duda. Esto está yendo más rápido de lo esperado, pero tengo los pies en el suelo. Me centraré en hacer lo máximo con mi equipo, porque eso me traerá también cosas buenas en lo personal.