Resignado a los viernes

El domingo, un lujo para los béticos

El domingo, un lujo para los béticos
El Betis se midió en la última jornada de liga al Málaga de nuevo el viernes. - R.A.
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 3 min lectura
Jugar el domingo se ha convertido en un auténtico lujo para el Betis, en una excepción dentro de un calendario donde los operadores televisivos le conceden, a su pesar, un rol protagonista en su parrilla del viernes, día del que están exentos los clubes en competición europea y el Valencia, con un acuerdo que le libra de disputar sus encuentros más allá del fin de semana. Condicionantes que dejan a los heliopolitanos como uno de los clubes más atractivos para la cita en abierto, lo que provoca el aluvión de partidos en esta fecha y su escasa presencia en el día por excelencia del Deporte Rey, el domingo. De hecho, hasta la fecha sólo en la jornada 3, ante el Valencia, ha podido disfrutar de la franja dominical, y no tendrá otra oportunidad hasta finales de octubre, en la décima semana de competición.

No en vano, LaLiga anunció ayer los horarios de dicha jornada, en la que los heliopolitanos reciben al Espanyol el día 30 en el Benito Villamarín, a partir de las 18:30 horas. Un espejismo dentro de un desierto con el viernes como referencia. Así las cosas, el Betis comenzó ayer a preparar su cuarto partido en viernes, el próximo en San Sebastián, con la tranquilidad de los deberes hechos tras ganar al Málaga por 1-0. Los de Gustavo Poyet ya han jugado en esta fecha en la segunda jornada ante el Deportivo de la Coruña en casa (0-0), en la cuarta frente al Granada, también en el Benito Villamarín (2-2), en la sexta ante el Málaga (1-0) de Juande Ramos y, tras el encuentro de Anoeta, volverán a hacerlo en la novena ante Osasuna el 21 de octubre.

La evolución exponencial del fútbol ha provocado que se pase del ‘habitual partidillo de los viernes’, coletilla que se empleaba para el ensayo definitivo cuando los partidos se jugaban en domingo, al habitual choque oficial que disputan en este día los equipos que no participan en competiciones europeas.

El uruguayo ya ha mostrado su resignación por las servidumbres televisivas y económicas de este tipo de encuentros que, según ha confesado, le cogen “viejo” por estar acostumbrado a jugar los fines de semana, aunque tras ganar al Málaga y colocarse en la zona media de la tabla (9º) con ocho puntos, se ha puesto ya manos a la obra.
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