Felipe Gutiérrez: un crecimiento invisible

El partido del pasado viernes ante el Málaga consagró a Álex Alegría, certificó el paso al frente en compromiso y derroche de Joaquín, ratificó que Adán siempre está ahí cuando se le necesita, al tiempo que Petros demostraba que, con confianza, puede aportar muchas más cosas que anticipación y briega. Pocos repararon en Felipe Gutiérrez, cuyo crecimiento en la última semana, con tres partidos en siete días, resulta notorio estadísticas en mano. Así, tras perderse casi todo el duelo ante el Granada -disputó sólo los cuatro minutos finales más el alargue, siendo objeto de un claro penalti que podría haber brindado el triunfo a su equipo-, el chileno lo jugó todo contra Sevilla y Málaga, sobresaliendo en lo físico.

Tanto es así que el dorsal 6 fue el que más corrió de cuantos participaron en el derbi (11,9 kilómetros), repitiendo guarismos y calcando mérito en lo que a despliegue se refiere contra los costasoleños. El martes, incluso, le tocó acabar el partido por las circunstancias como improvisado lateral zurdo, lo que no fue óbice para que fuera el que más recuperaciones de balón totalizó (10), con un pleno de aciertos en los cruces ante oponentes (11/11) y convirtiéndose en el segundo futbolista en número de faltas recibidas, después de Petros.

Entonces, Felipe destacó también en el tercio superior del campo, especialmente hasta la hora de encuentro. El otrora mediocampista del Twente es, de hecho, el tercer bético más valorado según las estadísticas oficiales de LaLiga, con 1895 mvp, sólo por detrás de Petros y Piccini. Promedia más de un 75% de acierto en el pase un Gutiérrez que sólo ha recorrido menos campo que el propio brasileño (51,20 kms) y Rubén (43,35), aunque habría que precisar que el primero ha estado 508 minutos sobre el mismo, por 513 del canario, mientras que el internacional andino lleva aún 386 para completar sus algo más de 42 kilómetros (más de la mitad de ellos en estos dos partidos).

Y no sólo en lo puramento físico y defensivo resalta el chileno (82,61% de cruces ganados, sólo superado por Petros), sino también en la generación de juego. De hecho, ‘preasiste’ a Piccini en la acción del 2-3 en Valencia y repite con Musonda en el 1-0 al Málaga. Y únicamente Petros (86) y Rubén (69) promedian más minutos por partido en contacto o próximo al balón, pues lo hace Felipe en 68. Un despliegue que tendrá repercusión sí o sí de gozar de continuidad.