El análisis

Un Betis a ratos y sin cerebro

Un Betis a ratos y sin cerebro
Ceballos pugna con Vela, autor del único gol del encuentro. - Alejandro Suárez
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 2 min lectura
Decía Gustavo Poyet durante la previa del partido que deseaba mejorar con el balón y sobre el campo fue fiel a su discurso, brindándole al canterano Dani Ceballos la primera titularidad de la temporada en un intento de evitar caer de nuevo en los errores del pasado: un Betis partido en dos que no supiera conectar con Alegría. Un objetivo que, sin embargo, no fue capaz de cumplir debido a la presión adelantada de la Real y que sólo alcanzó a ratos. Mientras, una Real Sociedad bastante ofensiva que triangulaba con facilidad y que gozaba de unos laterales con mucha profundidad, siendo numerosos los balones aéreos que cazaba en el área Willian José.

Un rival incómodo que no permitió estirarse a los de Poyet, que durante los primeros 45 minutos sólo vivieron de las tímidas aproximaciones por la derecha de un Joaquín, que corre como si tuviera 20 años pero al que ya le falta el sprint, y que consiguió conectar en una única ocasión con Alegría en el tramo final del primer periodo, cuando el Betis asentó un poco más su juego con algo de balón jugado, aunque sin claridad.

En la segunda mitad, ya con el 1-0 en contra, Poyet se equivoca en los cambios en un alarde de valentía que rozó el suicidio, dándole salida en un doble cambio a Joaquín y Rubén Castro, por Nahuel y Musonda, después de jugar unos minutos con un 4-4-2 en el que las bandas estuvieron reservadas para los laterales. Con ello, más de lo mismo, un Betis con menos pegada aún y sin posesión ninguna que buscó ser más directo sin conseguirlo en un alarde de corazón y no de cerebro.
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