Los intocables de Poyet

Alcanzado el primer cuarto de competición, el Betis continúa aún en fase de formación, aspecto en el que insistió el propio Gustavo Poyet en la rueda de prensa posterior a su reencuentro con la victoria en tierras navarras. Allí, el uruguayo obró una mini revolución en busca del dibujo y los nombres más adecuados para revertir su situación, prescindiendo, entre otros, de Rubén Castro. Un giro de tuerca que, sin embargo, no se cobró otras víctimas de peso, demostrando que el núcleo duro que ha construido desde principios de curso continúa contando con su plena confianza.

Antonio Adán: El único de la plantilla que acumula los 810 minutos
El mejoreño es el guardameta titular desde que aterrizara en el mercado invernal de la 13/14. Ningún entrenador ha osado discutirle, algo a lo que tampoco se ha atrevido Poyet. Las luces del canterano madridista, incluso este curso, superan con creces a las sombras, siendo el único componente del plantel que lo ha jugado todo: 810 minutos. Un auténtico seguro de vida para la escuadra verdiblanca Adán, que prácticamente no resta puntos y que los suma las más de las veces con sus actuaciones. En la 16/17, encima, está trabajando especialmente su juego con los pies, como confesó en una entrevista reciente con ESTADIO Deportivo, donde expresó también su deseo de que Miguel Torrecilla herede las ganas de Eduardo Macià de mejorarle el contrato con la condición de que también aumente su cláusula de rescisión.

Germán Pezzella: Afianzado en el perfil zurdo, una lesión impidió el pleno
La pareja Mandi-Pezzella es, sin duda, la preferida del entrenador, que únicamente recurrió a Bruno cuando necesitó pertrecharse con tres centrales (en el Camp Nou) o cuando el franco-argelino estaba lesionado. El argentino es otro de los que dio un paso al frente, después de una campaña de estreno algo discreta, fundamentalmente por la ausencia de confianza en sí mismo. Más rápido, agresivo y concentrado, el ex de River Plate se ha acomodado a pierna cambiada, destacando en el perfil zurdo, hasta el punto de que solamente una lesión ante el Málaga lo ha sacado del terreno de juego e impedido el pleno de minutos. Volvió la semana siguiente, con idéntico respaldo desde el banquillo, circunstancia que, unida a los 'cantos de sirena' que ya comienzan a escucharse desde el Calcio, dada su doble nacionalidad, podrían hacerle pasar por el despacho de Miguel Torrecilla más pronto que tarde, pese a que está atado hasta 2020.

Petros Matheus: El 'stopper' que evita males mucho mayores al Betis
Sin ser, estrictamente hablando, un pivote defensivo, el brasileño se ha adaptado perfectamente a esa posición, volviéndose más posicional y aunando virtudes que ya tenía (como la capacidad innata para robar balones) con otras adquiridas (como las coberturas a los compañeros o el inicio de las transiciones). Su corrección en el pase y un indudable rendimiento que avalan las estadísticas están consiguiendo cambiar la opinión de muchos de sus detractores, pero en su debe juega que, como se dice vulgarmente, se mete en todos los charcos, bordeando una expulsión que ha logrado esquivar hasta ahora, al igual que su primera semana como apercibido de suspensión por acumulación de amonestaciones. Junto a Adán y Pezzella, Petros es el único que ha sido titular en las nueve jornadas disputadas, disfrutando de una confianza de Poyet que se ha ganado en el campo. De paso, se ha convertido en un futbolista mucho más completo, aumentando, sin duda, su caché tras el estreno en Europa.

Cristiano Piccini: Mantiene el crédito desde Barcelona a pesar de todo
El italiano no actuó en la primera jornada, aunque, a priori, la línea de cinco planteada por el míster uruguayo en el Camp Nou beneficiaba sus condiciones de carrilero. Allí, el responsable de elegir se decantó por Cejudo, aunque asumió su error y no volvió a apostar más ni por los tres centrales ni por otro en su puesto. El caso es que Piccini ha sido indiscutible desde la jornada 2 hasta la 9, partiendo ya desde el inicio en todos los partidos. Se antoja el caso más discutido, ya que, si bien atesora tres asistencias de gol (que pudieron ser cuatro si Joaquín aprovecha el pasado viernes su gran pase en la segunda parte del Osasuna-Betis), flaquea continuamente en labores defensivas, apareciendo en las foto de la mayoría de los goles encajados por el conjunto verdiblanco hasta ahora.

Joaquín Sánchez: Por su mejor arranque goleador, ni con agua caliente
El propio portuense ha bromeado en alguna ocasión con el hecho de que, pese a la disputa de una jornada intersemanal, su edad y otras contingencias, Poyet es reacio a sacarlo del campo. Buena parte de culpa de sus 648 minutos (el 80% del total) y tres encuentros completos la tiene él mismo, puesto que Joaquín ha sido titular desde su ostracismo en Barcelona, completando el segundo mejor arranque goleador de su dilatada carrera. Y es que sólo en la campaña 2002/2003 había logrado antes tres tantos en Liga -lo hizo en cinco jornadas-, al tiempo que necesitó las mismas nueve entregas que ahora en la campaña anterior.

Rubén Castro: Una alianza que se debe recuperar como sea
Desacostumbrado a la suplencia, el máximo goleador de la historia del Betis podría tener que asumir este nuevo rol en caso de que Poyet decida dar continuidad ante el Espanyol al once que ganó en Pamplona. Por el bien de todos, el renovado Rubén y el entrenador que encabeza el nuevo proyecto deberían alcanzar un entendimiento más pronto que tarde, pues no parece un buen negocio prescindir de tu delantero más reputado. Bien en la izquierda o acompañando a Sanabria, el canario ha de ir regresando a la alineación y encontrando su sitio. De momento, a pesar de su presencia testimonial en tierras navarras, el dorsal 24 se mantiene en el club selecto de los que han participado en las nueve jornadas disputadas, aunque ya con sólo ocho titularidades, mientras que es el quinto aún en el ranking de minutos, con 680 de los 810 totales.

Durmisi, Alegría...: Una cuestión de peso, pero también de momentos
No se puede incluir en esta lista a Mandi, pues el entrenador siempre le entregó los galones de la titularidad cuando el internacional argelino estuvo en condiciones físicas para recibirlos, aunque sí a otras de sus apuestas, como Durmisi y Álex Alegría, que han experimentado altibajos de confianza en este arranque de campeonato. De un lado, el danés arrancó como fijo, pero, tras lesionarse y forzar su reaparición, Poyet lo dejó fuera de la lista para Pamplona. El carrilero zurdo deslizó en su perfil de Instagram que podría tratarse de unas molestias en una de sus rodillas, si bien desde la entidad se encargaron de precisar que fue una decisión eminentemente técnica. Por su parte, el míster no hizo debutar a Álex Alegría hasta la visita a Valencia, pero lo mantuvo hasta esta última entre los elegidos, en parte porque el placentino respondió con goles. Con todo, en cuanto Sanabria se ha recuperado, le ha quitado el puesto.