La de
Joaquín Sánchez es posiblemente la voz más autorizada del vestuario del
Betis. El portuense, líder verdiblanco dentro y fuera del terreno de juego, ha analizado los últimos acontecimientos que se han sucedido en el equipo, desde la marcha de
Poyet a la llegada de
Víctor. "Ahora empezamos de cero, se está trabajando con su filosofía y es lo que hay. El viernes hay un partido bonito e importante para recuperar ilusiones por parte de todos, de la grada y de todo el mundo. No sé discute que hay equipo para más, que todos tenemos que dar más para sacar los resultados. Tenemos que volver a disfrutar, tenemos equipo para disfrutar, porque los 90 minutos no se pueden estar sufriendo en el terreno de juego", ha dicho en los micrófonos de Cope.
Sobre la destitución del técnico uruguayo y la contratación de
Víctor, el extremo bético ha comentado: "Desde pretemporada hizo un gran trabajo. Se ha trabajado con los conceptos que creía que iban a dar mejores resultados. No han salido las cosas como hemos querido todos, pero ha sido un gran profesional en su parcela. No hay que buscar culpables, ni el entrenador ni los jugadores ni el club, sólo que la cosa no ha funcionado, no hay que pensar más en eso porque llega un entrenador con nuevas ideas. A Víctor lo conocemos como futbolista que ha jugado en equipos importantes. Conoce la
Liga española y sabe que llega a un equipo especial. No creo que tenga más presión que cualquier otro. Está trabajando bien aunque los resultados serán los que manden".
El portuense ha querido dejar claro que los
jugadores son los primeros interesados en
cambiar la dinámica y salir de la zona de abajo. "Es verdad que estamos preocupados, pero no es el peor momento ni muchos menos en cuanto a crispación y problemas clasificatorios. Otras temporadas con plantillas enormes han sido peores y somos nosotros los que tenemos que estar tranquilos para que se vean como positivos todos los cambios que ha habido", ha manifestado el bético.
Por último,
Joaquín se ha referido a la
afición, de la que ha dicho que siempre es soberana y que corresponde al vestuario hacerles cambiar de opinión: "Siempre se tiene la mente puesta en hacer una buena temporada, aunque se está preparado también para cuando las cosas no vayan bien, porque la Liga española es muy buena y competitiva. Hay que afrontar estos momentos y los jugadores con la experiencia tratamos de que la gente no se desactive y que sigan enchufados. Somos un gran equipo y si enganchamos unos buenos resultados se verá otra cosa. No es un momento fácil para que la afición llegue con ilusión, lo sabemos. Somos nosotros los que tenemos que cambiar esto para enganchar a la gente y devolver la alegría a nuestra gente de una vez por todas".
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