La afición del Betis es muy reticente a que su equipo juegue en
viernes. Es un horario
incómodo y antinatural para el fútbol que molesta, sobre todo, cuando el equipo verdiblanco juega de local. El club logró que LaLiga accediera a limitar el número de encuentros que se juegan en el
Benito Villamarín en viernes, pero la televisión manda y cada vez que hay una ocasión de programar a los heliopolitanos fuera de casa es el elegido por la cantidad de
pinchazos que generan.
Teniendo en cuenta que los equipos europeos no juegan en viernes y que el
Valencia tampoco lo hace por contrato, el Betis es el favorito de las cámaras de
Gol. Pero hay un dato que puede animar a los detractores de este horario:
el Betis es el equipo que más puntos consigue en viernes.
Once unidades han sumado en los ocho partidos que ha disputado en la presente temporada. Son tres victorias, dos empates y tres derrotas en esos ocho partidos. Sólo desde que llegó Víctor, han sido tres los partidos jugados en viernes. El primero, de hecho, fue su debut, ante Las Palmas y con victoria por 2-0. Luego perdería en Eibar y en Vitoria ante el Alavés. Y es que si hay un pero a la estadística del Betis en viernes es que sus tres derrotas han llegado fuera de casa, mientras que en el Villamarín no ha perdido aún en el quinto día de la semana (dos victorias y dos empates en cuatro partidos).
Fuera de casa, además de en
Eibar y en
Vitoria, perdió en
San Anoeta ante la
Real Sociedad -curiosamente los tres partidos los perdió en el País Vasco-, mientras que el único triunfo a domicilio en el horario en el que se enfrentará esta semana al
Granada fue ante
Osasuna, con gol sobre la bocina de
Felipe Gutiérrez.
Entre los poderosos, el único que ha jugado en viernes ha sido el
Real Madrid, que lo hizo ante Osasuna en diciembre de 2014, aunque en aquel caso fue porque el conjunto blanco tenía que adelantar el choque para disputar el Mundial de clubes.