Ya se ha referido en estas páginas con
el caso de Diego Costa, opción totalmente descartada por la altísima inversión requerida, que el Betis está muy pendiente de
los movimientos del Atlético de Madrid. Los colchoneros, inhabilitados para inscribir futbolistas hasta el próximo 1 de enero, no han dejado de fichar, como quedó demostrado con
la rocambolesca ´operación Vitolo´, tarea que ampliarán a buen seguro las próximas semanas.
Una vez consultada por parte de los servicios jurídicos la legalidad de estas cesiones más o menos encubiertas, un responsable heliopolitano habría hecho saber a sus homólogos rojiblancos que en el Villamarín podrían tener acomodo mediocampistas o atacantes que no puedan ejercer de atléticos por el momento, asegurándose con la fórmula de ahorro preventivo ya apuntada en la información anexa los recursos suficientes para acceder a jugadores que, en otra tesitura, serían inabordables para el Betis.
Badelj, un gran ejemploLa tarea más complicada residirá en convencer al conjunto madrileño para que prolongue los hipotéticos préstamos durante toda la campaña, pues Simeone, como con Vitolo, pretende que los jugadores que recluten ahora
refuercen al Atlético en la segunda vuelta del campeonato 2017/2018, si bien podría considerar esta vía en caso de contrataciones con proyección pero todavía no consolidadas o con el bagaje suficiente en la elite, amén de otros llegados para demarcaciones sobrecargadas de efectivos. Con todo, de no poder lograr plenamente sus objetivos, los hispalenses se pondrían a disposición de los del Cholo para acoger cualquier salida invernal que fuera pertinente para hacer sitio a los recién llegados.
Uno de los futbolistas apuntados en esta agenda conjunta de Betis y Atlético es
el mediocentro Milan Badelj, que se resiste a renovar por la Fiorentina. Desde el Vicente Calderón insisten en que, hasta que no salga
Kranevitter, reforzarse en el eje de la medular no es prioritario, pero lo cierto es que siguen de cerca a
Fabinho (Mónaco) y el más asequible croata, muy del gusto de
Serra y Setién para completar su parcela ancha. Por ello, no pierden ojo a los movimientos rojiblancos.