Joel Campbell prendió la mecha de la esperanza

Ya lo había avisado Quique Setién. Este tipo de partidos podía darse. Su estilo de juego se expone a ello, como ocurrió en San Sebastián y como volvió a ocurrir ante el Valencia. La diferencia es que ayer el equipo se mostró poco consistente en defensa y, pese al arreón final, no pudo arañar, como en Anoeta, ni siquiera un punto.

Y eso que estuvo a punto gracias a la fe del equipo y a Joel Campbell, que fue el que prendió la mecha de la esperanza. La mejor noticia de la noche. Setién le dio algo más de un cuarto de hora, tiempo que no pudo aprovechar mejor. De hecho, a los dos minutos de saltar al campo anotó el 1-4, tras un 'regalo' de Parejo en la entrega.

Un minuto después asistió a Tonny Sanabria en el 2-4 y cuatro más tarde puso un balón al área para que Tello se estrenase también como goleador. Con él en el campo, el Betis recuperó la esperanza, se creció y creyó en la remontada, o al menos en la igualada, aunque los goles de Zaza y Pereira en el epílogo apagaron de un plumazo la magia del Villamarín.