Boudebouz, magia para acudir al rescate

El beticismo espera con ansias la mejor versión de su fichaje estrella. Y, poco a poco, Ryad Boudebouz va dejando destellos de ese futbolista determinante por el que el club de Heliópolis apostó fuerte en verano. Aún no está a su mejor nivel físico. Se demuestra con ese estilo más pausado que imprime a su fútbol, menos eléctrico. Pero, aun a ese ritmo, el franco-argelino puede ser decisivo, como quedó patente ayer.

Quique Setién tiró de él y de Sanabria a los 64 minutos. Era la solución del cántabro al mal partido de los suyos. Y ambos respondieron con sendos goles. En el caso del ex del Montpellier, al enganchar desde la frontal un derechazo -su pierna menos buena- que ajustó al palo derecho de Guaita para salvar un punto en las postrimerías del choque.

Aunque ya por entonces se había movido con inteligencia por dentro, haciendo gala de su buen desplazamiento, con cambios de orientación y de su visión de juego, con un pase al área que casi acaba en gol de Guardado. Ryad ya está aquí.