Boudebouz: el gol y lo que no fue el gol

Que Ryad Boudebouz debe convertirse en una pieza fundamental dentro de los esquemas de Quique Setién es una evidencia. Junto a Camarasa (7 millones de euros cada uno), fue el fichaje más costoso del pasado verano, segundo de la 'era ABA', tras el de Sanabria (7,5).

La lesión de rodilla que arrastraba en pretemporada y de la que recayó en el Bernabéu ha lastrado al franco-argelino, que debe apretar para alcanzar el ritmo alcanzado por un equipo que, por méritos propios, se está erigiendo en una de las revelaciones de la temporada. Con todo, el '10' firmó su primera actuación decisiva contra el Getafe, justo antes de este tercer parón por los compromisos de las selecciones que debe aprovechar, ahora sí, para ponerse a punto definitivamente, precisamente cuando el nuevo responsable de 'Los Zorros del Desierto', Rabah Madjer, le ha concedido un 'impasse' en las citaciones para que acabe de recuperarse.

Lo más vistoso de su aparición frente al cuadro azulón, lógicamente, fue el tanto del empate, logrado en las postrimerías y con su pierna mala, la derecha, si bien un análisis exhaustivo de su participación en la media hora de que dispuso (27 minutos, más los tres de alargue) revelan una aportación mayor. Así, pese a que erró seis de los 28 pases que intentó (79% de efectividad), fue el que mejor aprovechó el tiempo que estuvo en el campo, pues promedió casi un pase por minuto (0,93). Solamente Guardado (0,98, con un 80% de éxito) se mostró más activo que Boudebouz, que robó un balón y auxilió en la salida a Javi García, Mandi, el propio mexicano y los extremos, ofreciéndose en segunda línea y generando espacios.