Rubén Castro: Nunca es tarde para mimar a una leyenda

Rubén Castro: Nunca es tarde para mimar a una leyenda
Rubén Castro, en el partido ante Osasuna la temporada pasada. - M.H.
Óscar MurilloÓscar Murillo 4 min lectura
El Betis ha terminado por darse cuenta de que, con todos los matices habidos y por haber, se podían hacer mucho mejor las cosas con Rubén Castro, toda una leyenda viva en verdiblanco que, encima, vendrá como anillo al dedo al grupo de Setién a partir de enero. Y es que lo más seguro es que la temporada haya acabado para Tonny Sanabria, intervenido de una lesión de rodilla con pronóstico muy incierto, por lo que el supuesto conflicto por la convivencia durante la segunda vuelta de la 17/18 de tres delanteros en un equipo donde sólo juega uno como titular se ha desvanecido.

En este sentido, los contactos entre la entidad heliopolitana y el artillero grancanario, casi inexistentes desde su marcha a la Chinese Super League -ni siquiera tras su regreso el pasado 9 de noviembre-, se habrían intensificado en las últimas semanas. De esta forma, según apuntaba ayer Radio Sevilla, Alexis Trujillo, paisano del punta de La Isleta y mano derecha de Serra Ferrer al frente del área deportiva, habría ejercido de intermediario, sirviendo estas reuniones para hacer ver a un Rubén algo molesto por el desdén que percibía desde la planta noble del Benito Villamarín que, antes al contrario, se le dará el sitio que merece a partir de enero, cuando recuperará su dorsal 24 y un estatus que estaba en entredicho.

No obstante, concurren otras cincunstancias que provocan que el Betis tampoco las tenga todas consigo respecto al delantero más goleador de su centenaria historia. De un lado, hasta dos equipos chinos (el Guizhou Hengfeng Zhicheng de nuevo y un segundo por desvelar) habrían hecho llegar ya sus propuestas a la agencia que representa los derechos del futbolista, con cantidades económicas bastante jugosas, con lo que la propia Bahía Internacional estaría presionando al interesado para que repitiese su exótica aventura.

Del lado verdiblanco juegan tanto su encaje monetario en el presupuesto del presente ejercicio (su sueldo para lo que queda de curso estaría amortizado ya con la renuncia previa de Rubén para llevarse 2,5 millones de euros netos por seis meses allí) como el confeso deseo del delantero de establecerse de nuevo en tierras sevillanas junto a su mujer y sus dos hijos.

De todas formas, no podría comenzar a ejercitarse a las órdenes de Quique Setién hasta el 1-E, habida cuenta de que el club asiático que posee todavía sus derechos federativos solamente aceptaría que trabajase con el Betis a cambio de que el '24' (en China, el '40') renunciase a parte de las cantidades que le quedan por percibir.

Por ende, se ha pactado esperar hasta la fecha prevista, por mucho que pueda afectar la inactividad al estado de forma de un ariete que, sin embargo, presume de una condición física envidiable a sus 36 años y que no tendría problemas para ponerse a tono rápidamente. Por si acaso, el club hispalense ya le habría puesto un entrenador personal a tal efecto. Nunca es tarde para mimar a un mito.
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