El Betis está empeñado en utilizar este semestre posterior al mercado invernal, especialmente los primeros meses, para trazar el boceto de equipo para la próxima temporada, adelantando todo el trabajo posible, especialmente en materia de fichajes.
Así, la llegada de Marc Bartra en enero debe entenderse como una apuesta de presente y futuro, eliminando de la lista uno de los refuerzos por línea que, según entienden Serra y Quique, necesita una columna vertebral ya ilusionante. Además, el especial atractivo que posee este 2018, con varios futbolistas interesantes que terminan contrato, invita a aprovechar la coyuntura para esquivar a la competencia y hacerse a un precio ventajoso con refuerzos de nivel.
Como adelantó ESTADIO Deportivo el pasado mes de agosto, la apuesta en la portería por Pau López (23) es firme. Desde el entorno del jugador insisten en que todavía no se ha rubricado ese acuerdo, pues el Nápoles y un par de clubes ingleses aprietan por el catalán y podrían encarecer, como poco, la operación, pero desde la planta noble del Benito Villamarín se filtra algo más que optimismo, deslizándose que hay un acuerdo de larga duración no sólo de palabra y que el joven cancerbero, incluso, habría recibido ya un adelanto de la prima de fichaje que, en realidad, quedará prorrateada en su sueldo de las próximas campañas.
La llegada del gerundense no cierra la puerta a un segundo portero de garantías, pues se va Dani Giménez y Adán está en el mercado, apareciendo esta semana el nombre de Iker Casillas, que se marchará del Oporto y que no descarta volver a España, donde aportaría veteranía, liderazgo y muchas cosas más.
Pau ha abierto una senda que, salvo giro mayúsculo de los acontecimientos (previo pago de una penalización económica), le llevará hasta Heliópolis, donde esperan que otros iguales utilicen esa misma mía para mejorar la plantilla verdiblanca a coste cero (con matices). En ese contexto se enmarcan el sondeo al japonés del Eibar Takashi Inui (29), que sigue en conversaciones para renovar en Ipurua, pero que no termina de cerrar este asunto.
En tierras guipuzcoanas dan por hecho que los agentes del extremo viajarán de manera inminente, acaso este mismo fin de semana, allí para concretar su continuidad como azulgrana, aunque el Betis ha movido igualmente ficha para proponer al nipón un contrato de tres años y mejores emolumentos que los que le ofrecen los armeros.
Es posible que Serra haya llegado tarde, si bien fuentes de la negociación aseguran a este periódico que no está ni mucho menos decidido el futuro de Inui, quien encajaría perfectamente en los planes del cuadro hispalense por su calidad, su experiencia y ese valor añadido que le confiere su origen para la expansión de la marca Betis en el Lejano Oriente. Sea como fuere, se confirma el interés del área deportiva que comanda Serra Ferrer en varios jugadores de caché sin destino por el momento.
De esta forma, no es nueva la presencia en la subasta por el central del Oporto Iván Marcano (30), así como el tanteo a su homólogo y compañero Diego Reyes (25), mientras que puede haber llegado tarde por el interior Canales (27) y el mediocentro Dani García (27). Bien es cierto que el santanderino fue una petición de su paisano Setién en verano, pero no se apostó fuerte por ninguno de los lados entonces, con lo que el posterior paso al frente del zurdo va encaminado más a su prolongación de contrato en Donosti que a una salida. Sí se marchará del Eibar su capitán, pero muy probablemente hacia el Athletic.
Con todo, el tren hacia La Palmera ha partido con Pau López en el primer vagón, aunque con sitio de sobra para más pasajeros de este interesante perfil.
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