El
Betis teme que le quiten a
Fabián el próximo verano. Es una realidad, lo que no quiere decir que en Heliópolis se resignen a perderlo, como acabó ocurriendo hace un año con
Dani Ceballos. De hecho, las conversaciones con el palaciego y su entorno son constantes, llegando a la conclusión en la planta noble del Benito Villamarín de que se trata de casos muy diferentes.
Así, la voluntad del '6' está muy lejos de forzar una subasta al mejor postor, si bien los pretendientes se agolpan en su puerta. Casi ha sido un alivio para los dirigentes verdiblancos que
Lopetegui no se lo haya llevado al
Mundial ni lo incluyese en la nómina de recambios. Bromas aparte, la cotización del mediocampista zurdo ha subido esta campaña como la espuma, lo que, unido a sus particulares características (calidad, pie izquierdo, llegada, 22 años de edad, 1,89 de estatura...), convierten los
30 millones de su cláusula de rescisión en una 'ganga'.
Incluso,
según ha podido saber ESTADIO, hay quien pagaría más de eso para decantar la balanza, aunque
Fabián tiene claras dos cosas: sólo se marcharía si sube un escalón de verdad, no a un igual o a un club menor de otra Liga, por muy pudiente que sea; y tendría que ser con la connivencia del
Betis, al que está muy agradecido por la oportunidad y por otras de índole laboral que brindó a su familia.
Quique Setién, con mayor margen de maniobra del que tuvo con
Ceballos, ha dialogado en varias ocasiones con el de Los Palacios para convencerle de que un año más aquí lo hará un jugador más completo y preparado para la exigencia de un 'grande'. Y es que en la entidad hispalense todos están poniendo su granito de arena para retener a toda costa a
Fabián. Es más, el plan de
Serra y el cántabro es el de rodearlo de talento para que se sienta aún más realizado.
En este sentido, con
Inui y
Canales ya atados (como el cancerbero
Pau López), el
Betis rastrea el mercado en busca de dosis extra de magia para la parcela ancha, en la que cuenta con el '6'. Como ya se informó en este periódico, las conversaciones con
Ceballos para obrar su retorno van por buen camino, si bien las trabas no son únicamente económicas.
Como alternativas,
As y
Diario de Sevilla apuntan esta semana los nombres de los no menos caros
Óliver Torres (por el que el Oporto pide 15 kilos, ya que le costó 20 hace un año) y
Mikel Merino. De perfil más defensivo el navarro, que ha actuado en la sub 21 (con Fabián) como central, incluso, el
Athletic se antoja el gran rival por este pivote espigado (1,86) y preñado de clase que no ha terminado de hacerse un sitio en el
Newcastle (donde también juega el deseado
Ayoze Pérez). Eso sí, pagaron 10 millones por él...