Se le ha preguntado tantas veces a Emery por su futuro que apenas se presta ya atención a sus respuestas. Sí, el periodista está obligado a planteárselo aun sabiendo que el vasco no va a responder algo concreto. No lo haría nadie en su situación, y menos aún él, un experto en dar muchos rodeos sobre una misma idea.
El miércoles, sin embargo, dijo algo novedoso: "Trabajo pensando en quedarme toda la vida en el Sevilla". Muchos lo entendieron como un juramento de amor eterno, como un deseo de continuar, pero tras la frase, en realidad, se esconde otro mensaje: Daré todo aquí hasta que me vaya. Eso puede ser este verano o Dios sabe cuándo.
Lo que no quiere hacer Emery es 'un Rakitic', sino ir siempre de frente. No ha dicho claro que quiera quedarse porque no lo sabe, simplemente. Hace tiempo que intuyo que dependerá de si hay Champions o no, y cada vez lo tengo más claro. Ahora bien, como a Florentino le dé por levantar el teléfono...
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