Llevaba semanas mostrando malos síntomas: menos seguridad defensiva, más problemas para sacar el balón jugado, falta de continuidad Lo mejor que es ni estando así pierde; lo malo, que llega
al partido más importante de la temporada, al histórico de Leicester,
en su peor momento de toda la temporada.
El Sevilla está irreconocible, hasta el punto de que ha dejado que el
Leganés, con poco, se lleve un punto del otrora sagrado Sánchez-Pizjuán. A Inglaterra llegará Sampaoli con muchos futbolistas descansados, pero con
la sensación de que pasar de ronda no será tan fácil como se veía hace tiempo y, sobre todo, como se estimaba una vez que salieron todas las bolas en el sorteo.
Y no es sólo que haya
jugadores muy por debajo de su nivel, es que también
lo está el propio Sampaoli, quien últimamente
no acierta con los planteamientos (se está viendo obligado en exceso a rectificar durante los partidos)
ni tampoco con los cambios. Este sábado, ni la entrada de
Vietto y N´Zonzi tras el descanso ni la posterior de
Iborra le dieron nada al equipo.
¿Tan mal está Ganso como para no jugar ni un solo minuto en un equipo al que se le ha olvidado jugar al fútbol?
De extremadamente ofensivo a extremadamente soso. La Liga se puede escapar, porque "la punta" suele ser cosa sólo de los poderosos, pero caer en Leicester, visto el excelente nivel que llegó a alcanzar el equipo,
sí sería un fracaso. En el propio Sevilla está.
Tiene que volver a ser reconocible.