Sánchez pide un poco de paciencia

El escolta del Baloncesto Sevilla Alfonso Sánchez aseguró ayer, en los micrófonos de Radio Marca, que, aunque la situación del equipo es delicada tras cinco derrotas consecutivas, no hay que dramatizar. “Bueno, manteniendo un poco la cabeza en su sitio, pero sabemos que no están saliendo las cosas como nosotros queremos, como nosotros trabajamos durante la semana. Y pedimos un poquito de paciencia para lleguen esos resultados y esa imagen que queremos dar siempre”, manifestó.

Cuestionado sobre los aficionados que abandonaron San Pablo antes del final del encuentro, molestos por la imagen del equipo frente al ICL Manresa, el jiennense se mostró comprensivo.

Entiende el enfado

“Nuestros aficionados están en su derecho. Igual que aplauden cuando les gusta. Es entendible que la gente se vaya a su casa, o se enfade o nos pite. Pero bueno, nosotros estamos centrados ya en el partido de Málaga, lamentamos mucho la imagen que dimos y simplemente queremos enfocar nuestra atención en eso. En el trabajo diario, en entrenar, en seguir esforzándonos. Y estamos convencidos de que todos sumamos y de que el trabajo al final se va a ver seguro”, añadió el escolta del C.B. Sevilla.

“Esos periodos, en los que recibimos muchos puntos y parece que se nos van los partidos, pues simplemente son malas acciones que suceden tanto en ataque como en defensa, que hacen que el partido se rompa. Quizás nos haga falta un poco más de cabeza, de veteranía, de experiencia. Y decir ‘vamos a jugar un ataque calmado’”, afirmó el jugador andaluz.

No entra en los fichajes

Finalmente, Alfonso Sánchez declinó entrar a valorar los posibles refuerzos del equipo hispalense, después de que haya quedado paralizada la llegada del base sueco Ludde Hakanson. “Esa pregunta se la deberías hacer a Luis (Casimiro) o al presi. En ese sentido no puedo aventurarme, porque desconozco totalmente las opciones que se están barajando. O si se están barajando, si hay suficiente dinero...
Los que estamos nos estamos partiendo la cara todos los días. Es la cara más amarga del jugador profesional y parece que todo el trabajo no sirve para nada. Pero cuando sales, al final te enorgulleces de haberlo vivido”, apuntó el escolta jiennense después del último varapalo frente al ICL Manresa en San Pablo.