Domingo de Ramos, de Pasión y de presión para el Betis, que afronta el derbi andaluz ante Unicaja (San Pablo, 18:00 horas, Multi 2) en una situación crítica, dependiendo de sí mismo y con sólo 11 jornadas por delante para progresar en el camino hacia la salvación.
Óscar Quintana fue categórico: "Hay que ganar para mantener opciones de permanencia". La victoria se antoja vital tras las derrotas frente al
Andorra en San Pablo y el Bilbao en Miribilla, dos rivales, a priori, de su cuerda y que le brindaron la opción de salir del pozo. Y la desaprovechó sin miramientos.
La mejoría de los verdiblancos pasa por conseguir un juego regular y controlar el rebote ofensivo, dos problemas que les han costado muy caro en los últimos compromisos, encajando más de 90 puntos en contra. El
Betis ha demostrado una endeblez preocupante en los últimos tramos, con unos parciales finales de 19-36 ante los del
Principado y de 26-16 frente a los vizcaínos. "Nos cuesta entrar en los partidos. Tenemos que ser intensos desde el inicio", reconoció el entrenador.
Como novedad, los hispalenses contarán con
Txemi Urtasun, que se ha sumado al buque bético tras recuperarse de una lesión muscular y después de varias semanas trabajando con el equipo. El escolta ya estuvo en Sevilla entre 2010 y 2012 y conoce a la perfección las exigencias de la
Liga Endesa. Su aportación, junto a la de
Kelly, Schilb y Booker, debe ser crucial para reunir el máximo posible de triunfos en lo que resta de temporada.
También habrá 'estrenos' entre los costasoleños. Esta semana se ha unido el pívot francés
Livio Jean-Charles, quien se definió como un jugador polivalente, que puede aportar a
Joan Plaza "rapidez, defensa y anotación".
El
Betis afronta este envite muy renovado respecto a la primera vuelta (99-71), con
Zagorac, Booker y el navarro en sus filas, así como
Quintana en el banquillo.
A favor del
Betis puede estar el cansancio y la moral tocada de su rival.
Unicaja jugó el viernes
Euroliga, donde encajó una dura derrota que le apeó del sueño del título.
Además, los malagueños no están este año muy finos lejos del
Martín Carpena, acumulando siete derrotas en los 12 compromisos que han disputado como visitantes hasta la fecha.
Las aspiracionesTanto
Betis como
Unicaja llegan muy necesitados a esta cita, aunque con objetivos muy dispares. Los sevillanos tienen la necesidad imperiosa de rehacerse para no precipitarse a
LEB Oro; mientras que los malacitanos lucharán para no descolgarse de la pugna por los cuatro primeros puestos.
Los verdiblancos son ahora penúltimos con sólo cinco triunfos, a uno del
Burgos y a dos del
Bilbao y del
Zaragoza, con lo que están obligados a dar la cara, y tomar oxígeno en una fase decisiva de la
Liga. Los antecedentes están del lado bético:
Unicaja ha caído en sus últimas tres visitas.
Gracia Ávila4 min lectura