KFC, es su intento por establecer su mercado en territorio chino, ha lanzado en Hong Kong una línea de pintauñas comestibles con sabor a pollo, en comunión con el último lema de la compañía de comida rápida: "Para chuparse los dedos". Según ha anunciado la propia marca, que ha hecho una amplia campaña promocional sobre el asunto, se trata de un producto conseguido con ingredientes naturales. Se desarrolló entre la compañía de publicidad, un grupo de expertos en tecnología de los alimentos y McCormick, la empresa que se proporciona a KFC la mezcla de 11 hierbas y especias del rebozado de sus productos. El esmalte de uñas está disponible en dos versiones: sabor original y picante.