El
Premio Golden Boy es un trofeo anual que desde el año 2003 entrega el diario italiano
'Tuttosport' tras la votación de 30 periodistas deportivos de toda
Europa. En su primera votación, el elegido fue un viejo conocido del
Betis:
Rafael van der Vaart, entonces prometedor futbolista que destacaba en las filas del Ajax.
Pero no es la única vez que la treintena de periodistas que eligen al 'Chico de Oro' del año no aciertan de pleno en su decisión. En años anteriores, la mayoría de futbolistas que han sido galardonados con este premio han llegado a cotas altas del fútbol mundial. Jugadores como
Messi, Pogba o
Götze avalan las decisiones de los votantes pero hay otros casos en que, dicha decisión, no cumplió las expectativas.
Anderson Luiz de Abreu Oliveira, centrocampista brasileño más conocido por su primer nombre
Anderson, aterrizó en
Europa con 20 años. El
Porto se hizo con el joven jugador por un módico precio, pero un año año más tarde, el
Manchester United desembolsaría alrededor de 30 millones de euros por el brasileño y, en ese mismo año, recibió el 'Golden Boy'. En su primera temporada no contó con muchas titularidades y el conjunto inglés se proclamó campeón de la
Premier y de la
Champions League en aquella famosa tanda de penaltis. Las temporadas pasaban y la joven promesa comenzó a ser la 'eterna promesa'. Tras comenzar a caerse de las convocatorias, el futbolista fue cedido a la
Fiorentina y a su regreso a
Old Trafford se encontró a un
Van Gaal que terminó por desterrarlo.
Anderson ha vuelto a
Brasil y a sus 28 años milita en las filas de
Internacional de Porto Alegre. El ex 'red devil' ha protagonizado alguna polémica en los últimos meses donde acabó a
puñetazos con un compañero durante un entrenamiento.
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