O el presidente del Rayo se retracta o tomará medidas

Marcelino amenaza a Martín Presa

Marcelino amenaza a Martín Presa
Marcelino aclaró su salida del Villarreal.
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 3 min lectura
Marcelino García Toral requirió públicamente al presidente del Rayo Vallecano Raúl Martín Presa, una rectificación pública de sus manifestaciones, en las que comparó al entonces técnico del Villarreal con el piloto de Lufthansa "que causó la muerte de 129 personas" en un accidente aéreo.

"En este momento requiero públicamente al señor Martin Presa para que se retracte en las próximas horas por su desafortunada opinión publica, por la comparación entre mi persona y un individuo que se llevó la vida de 149 personas. Ni estoy loco, ni soy un asesino, mi profesión es ser entrenador de fútbol, honrado y profesional. El señor Presa me ha insultado y ofendido. Si no rectifica de inmediato ejercitaré las opciones legales necesarias", dijo Marcelino, que en rueda de prensa aseguró que llamó "personalmente" al presidente del Villarreal Fernando Roig y este le dijo que "nunca dudó" de su "profesionalidad y su honestidad".

En cuanto a las palabras de Fernando Roig, se mostró "sorprendido, aunque también advirtió que lo había aclarado todo con el dirigente del Villarreal. "Estoy sorprendido por las declaraciones de los últimos días. No hice nada para alterar la competición. Ante la repercusión mediática de las palabras del presidente, me he visto obligado a exponer mi versión. Mi relación con Roig siempre ha sido respetuosa y cercana. El trato que he recibido durante todo este tiempo ha sido impecable. El pasado 10 de agosto, cuando se prescinde de nuestros servicios, jamás se me expresó que uno de los motivos para cancelar mi contrato fueron las dudas sobre mi honradez", asegura Marcelino, quien decidió antes hablar con Roig a contestarle públicamente: "Conociendo al presidente apliqué el beneficio de la duda y no atendí a los medios, a los que pido perdón. Algo no encajaba entre sus palabras y los hechos que ambos conocíamos. El domingo decidí llamar a Fernando Roig para clarificar esta desagradable situación. Me atendió con el respto y cariño de siempre y me aclaró que nunca dudó de mi profesionalidad. Hago pública esta llamada personal, porque el presidente me lo autorizó. Tenía claro que mi profesionalidad no está en duda. Agradezco sus palabras sinceras al decirme que me hubiera destituido inmediatamente en caso de tener dudas de mi honradez y profesionalidad".

Por último, se ha puesto a disposición de los "organismos competentes" para aclarar "cualquier duda" sobre el expediente que le han abierto. "No tengo nada que ocultar y estoy aquí para lo que precisen. Ha llegado el momento de separar las palabras de los hechos", aseguró.
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