El San José tiene el próximo domingo ante sí la última oportunidad de engancharse a las plazas de ascenso a Tercera división. No será fácil, puesto que al partido de los azulinos en casa del Brenes, se le une la ventaja de dos puntos que mantienen la Lebrijana y la Rociera, que además sumará sus tres puntos en la última jornada por la retirada del Marinaleda.
La empresa es, por tanto, muy complicada pero
Juan Carlos Garzón, técnico del San José, no tira la toalla. “Está claro que es muy difícil. La Rociera tiene un partido asequible en casa y no parece fácil que fallen. El partido de la Lebrijana, en Espiel, sí será más complicado”, asegura el míster de los rinconeros, que no obstante es consciente de que el primer paso será ganar su partido. “El Brenes juega ya sin presión y eso es un arma de doble filo. Nosotros iremos a ganar y a no darle opción al rival, aunque no esperamos que nos lo pongan fácil”, asegura Garzón.
A dos jornadas del final, el míster del San José valora positivamente la campaña de su equipo. “La temporada ha sido muy buena. El club se marcó el objetivo de salvar la categoría, pero nosotros queríamos mejorar el octavo puesto de la temporada pasada”, recuerda Garzón, que reconoce que
: “Como hemos estado cerca de pelear el ascenso, el final ahora puede parecer un poco amargo. Sin embargo, hay que valorar el haber estado ahí todo el año”.Independientemente del desenlace de estas dos jornadas, Juan Carlos Garzón tiene claras las bases de su proyecto deportivo. “Si al final no podemos pelear por el ascenso tendremos que seguir pensando en desarrollar el proyecto de cantera que el club se planteó”, asegura el entrenador de los azulinos, que es consciente de las dificultades económicas:
“Nuestro proyecto está supeditado al tema económico, como la mayoría de los equipos del fútbol modesto. La única oportunidad con el agujero económico del fútbol modesto es aprovechar la cantera y seguir contando con gente de la casa en el equipo”.
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