El
romanticismo en el fútbol se va perdiendo. Los intereses económicos que rondan al mundo del balón privan a este deporte de sus valores troncales para llenarlo de
superficialidad. Sin embargo, aún quedan equipos donde el balompié sigue estando por encima de los euros, como es el caso de la
Estrella.
Este modesto equipo es una de las irrupciones más agradables del
fútbol sevillano. Treinta años forman la historia de la entidad blanquiazul, emblema del alcalareño barrio de
Rabesa.
Alexis, Carlos, Iván, Josué, Pablo, Jaime, Roca, Manolo, Alberto, Enrique, Carlos Rodríguez, Galiano, Álvaro, Rubén, Jesús, Jaime, Mariano, Toni, Quesada y Soto, junto al cuerpo técnico encabezado por
Domingo Caro, están firmando la mejor página de la historia de la
Estrella.
El mérito de este equipo es importante. No en vano, de los veinte jugadores que forman la plantilla alcalareña, sólo cinco son ´foráneos´: el carmonense
Lolo; el pedrereño
Rubí; el nazareno
Lolo y los capitalinos
Iván y
Roca. El resto, todos alcalareños. Un total de quince.
Esto da muestras de la identificación del barrio con su equipo, aunque pese a la gran temporada la asistencia del público ha sido inferior a la de otras campañas, pudiendo influir las dos campañas que la
Estrella ha pasado fuera de
Rabesa por las instalación del césped artificial en su terreno de juego. El romanticismo de este equipo radica en que su fortaleza es el grupo. Y es que ninguno de los integrantes de su plantilla cobran un solo euro. Únicamente los jugadores que no son de
Alcalá se les abona los gastos de desplazamiento.
La unión predomina en una
Estrella cuya media de edad es muy joven (22 años aproximadamente). El conjunto alcalareño ha tenido que lidiar con conjuntos de mayores presupuestos y recursos, ya que hay que señalar que la Estrella no cuenta con
escalafones inferiores, teniendo que hacer frente con los veinte efectivos con ficha, perdiendo durante la mayor parte del campeonato un jugador importante como es
Soto, lesionado buena parte del campeonato y castigado federativamente los últimos seis encuentros.
No obstante, la modestia de la
Estrella no va reñida con una gran organización. En este sentido, hay que destacar su cuerpo técnico. Encabezado por
Domingo Caro, lo completan:
Javi Pérez (segundo); Adrián (preparador físico);
Ramírez (fisio) y el delegado
Cristóbal.
Marcos, encargado de las redes sociales, y
Paco, jefe de prensa, conforman un modesto organigrama, pero cuyo engranaje funciona como un reloj suizo.