Cisco (Nervión) y Molina (Rinconada), dos estetas en la cruzada

Pocos partidos acaparan la atención como el Nervión-Rinconada de mañana. La cita, en el Antonio Puerta a las 17:00 horas. Primero contra segundo de Segunda Andaluza se ven las caras. Dos equipos marcados por la personalidad y carácter de sus entrenadores, Antonio Rueda y Andrés Millán, dos conjuntos que tienen la única meta del ascenso.

Nervionenses y rinconeros se caracterizan por su extremada competitividad, dos escuadras cuya intensidad en el juego son sus señas de identidad, dos equipos en los que los virtuosos con el balón se han adaptado a su fisionomía. Así, Cisco (Nervión) y Molina (Rinconada) se han mimetizado en el engranaje de unos conjuntos que aspiran a todo.

"Será un partido fuerte ante un rival fuerte. Si marcha segundo será porque nadie le ha regalado nada. Tiene un estilo parecido a nosotros y son muy correosos, por lo que hay que ponerse las pilas para continuar imbatidos. Queremos continuar aumentando nuestras estadísticas, por lo que saldremos con un extra de motivación", señaló Francisco Javier Rodríguez López 'Cisco', toda una declaración de intenciones de uno de los principales activos del líder.

Autor de ocho goles, es el máximo artillero blanquiazul pese a haberse perdido cinco jornadas por lesión. Natural del sevillano barrio de Palmete, creció futbolísticamente en la Carretera de Utrera, siendo compañero de los todavía sevillistas Mode, Borja Lasso o Beto, entre otros. Jugador que se desenvuelve en toda la media punta, aporta el talento a un equipo que no quiere distracciones: "Vamos partido a partido. Como pensemos más a largo plazo que a corto, malo. Solo pensamos y hablamos del siguiente encuentro".

Y la próxima parada del Nervión es el Rinconada, donde brilla esta temporada con luz propia Molina, encontrando en su segunda temporada en las filas rinconeras la regularidad que no tuvo el pasado ejercicio. "Tuve pocas oportunidades. Los pocos ratos que jugaba eran de carrilero zurdo, donde estoy jugando ahora", declaró este mediapunta reconvertido que en su último año juvenil actuó en La Palma de División de Honor. Ya en sénior, tuvo un paso breve por el Cerro (debutó en Primera Andaluza), dos campañas en el Ciudad Jardín y actualmente cumple la segunda con los rinconeros.

Con seis goles, sobresale en una posición a la que se ha adaptado gracias a la ayuda de Andrés Millán, técnico blanquiazul: "Me ha hecho más competitivo. Este año he cambiado y comprendido que lo primero es defender, y luego, hacer daño".

Respecto a la gran cita de mañana, apuntó que: "Tenemos ganas de jugar y probarnos. Motiva el hecho de que nadie le haya ganado. Son un equipo parecido a nosotros".