Juan Carlos Garzón, cuando todo empieza mal

El Mairena sigue viviendo una temporada casi de pesadilla en la que todo lo que puede ir mal se vuelve aún peor. El último acto de este mal sueño se vivió el pasado fin de semana en el encuentro entre el cuadro blanquinegro y el Pozoblanco.

Juan Carlos Garzón, entrenador del Mairena y que se estrenaba en el cargo, se rompió el tendón de aquiles cuando se cumplían 30 minutos de la primera mitad. La mala suerte se cebó con el técnico, el cual tiene que ser operado en las próximas horas.

Este medio contactó con él, minutos antes de ingresar en el hospital, para saber como ocurrió todo: “Era el minuto 30, estaba dando indicaciones cuando ocurrió todo”, relató el míster.

Debido a la operación y al tiempo de recuperación, el cual se estima que será de tres a cuatro meses, el preparador deja el cargo para que la escuadra de San Bartolomé pueda encontrar a alguien que pueda estar con la plantilla a tiempo completo. Por lo tanto, los alcoreños vuelven a estar de casting en los banquillos como hace una semana escasa.

Cuestionado por el futuro del equipo, Garzón opinó que hay mimbres para revertir la situación. “Se vio en la primera parte, que hay equipo para salir de los puestos de peligro”.

El ya exentrenador mairenero sólo piensa en recuperarse aunque no descarta volver en un futuro al banco blanquinegro si se presenta la oportunidad.