Los protagonistas en el fútbol son los jugadores. Son el reclamo para que los aficionados acudan al campo y sigan a sus equipos. Pero en el vestuario, además de futbolistas y cuerpo técnico, existen otras figuras imprescindibles, más si cabe en el fútbol amateur.
Este es el caso de
Rafael Azogue Palma. Figura respetada y querida en el
Morón y en la localidad aruncitana, hasta el punto que le conocen como 'el señor', a sus 68 años ha decidido aparcar su faceta futbolística. "Ya es hora de descansar", señala este apasionado de los colores rojo y blanco, que pone así punto final a una aventura que comenzó en 1973.
"Un día fui al fútbol a través de un compañero de trabajo cuyo hermano jugaba de portero (Indio). Poco a poco me fui metiendo, hasta que me metí", comenta esta figura rojiblanca.
Su principal labor ha sido la de delegado, aunque
Rafael Azogue ha desempeñado las últimas temporadas la función de utillero, cuidando hasta el último detalle. "Me gusta mimar a los futbolistas. Cómo no me van a querer, si le lavo hasta la ropa", apunta con su habitual sentido del humor.
No se arrepiente de su entrega por el
Morón, aunque reconoce que ha tenido que pagar un peaje. "He pasado más tiempo en el campo que en casa (durante la conversación se dirigía al Alameda recogiendo carteles de un partido). Ahora estoy jubilado, pero antes iba del trabajo al campo. Ni me paraba a merendar. Costándome el dinero. A mis hijos ni los he visto", recuerda
Rafael, que seguirá yendo a ver a su
Morón, con un acompañante muy especial: "Mi nieto. Ahora tendré más tiempo también para dedicarme a él".
Por otro lado, el Morón ha cerrado el fichaje de
Sergio Hurtado. El ex delantero del
Cerro ha decidido proseguir jugando en las filas rojiblancas. Con la ficha ya tramitada, podría debutar mañana.