(La Liara) Todo quedó en un susto

Por segundo fin de semana consecutivo, el fútbol sevillano vivió momentos de tensión. Si en la jornada anterior fue el preparador físico del Ciudad Jardín (Edu) quien acaparó la atención al desvanecerse ante el Tomares, esta vez el foco estuvo en el Villafranco-La Liara.

Antonio, guardameta de los palaciegos, recibió un rodillazo en la cabeza en una acción que le obligó a pedir la sustitución en el minuto 78’ al estar mareado.

Ya en el banquillo, sufrió desmayos y perdió la visión, desencadenando momentos de tensión. Lo atendió el médico del ambulatorio de Isla Mayor, pero dado que estaba en consulta tuvo que marcharse, llamando a una ambulancia de Coria del Río para trasladarlo a la localidad ribereña, aunque dada la tardanza y que Antonio continuaba en un estado delicado se decidió llamar al 061, que acudió tanto con una ambulancia como con un helicóptero, siendo trasladado en este al Virgen de Rocío de Sevilla.

“Ya una vez allí reaccionó y comenzó a ver mejor, aunque no se acuerda casi de nada. Quiero agradecer el trato y la atención del Villafranco. Por suerte, todo ha quedado en un susto”, declaró Sergio Moguer, míster de La Liara.