El
Betis B, con 30 jornadas disputadas, es penúltimo en la tabla con sólo
23 puntos. La Liga es el torneo de la regularidad y si el filial se encuentra en descenso es por deméritos. Sin embargo, en los últimos partidos el cuadro verdiblanco lamenta las expulsiones sufridas en momentos clave.
Así, en
Cartagena, en la última jornada, sufrió la tercera en cuatro jornadas. Esta no fue determinante, ya que
Pozo vio la roja en el 88´, pero las precedentes sí:
Narváez ante el
San Roque de Lepe en el 52´ (con 1-0 a favor del Betis B, que acabó empatando) y
Francis frente al
Linares en el 55´ (con 1-0 para los béticos, que sucumbieron por 1-3).
Y no han sido las únicas, ya que el
Betis B ha sufrido un total de
8 expulsiones en las 30 jornadas que se llevan jugadas. Cinco de ellas han sido rojas directas y tres dobles amarilla, siendo Pozo el único que ha repetido, aunque ambas rojas en los minutos finales. El dato llamativo es que de los 2.700 minutos que se llevan jugados, el filial verdiblanco ha tenido que disputar 261´ en inferioridad, es decir, casi tres partidos completos (2,9). Sin duda, una desventaja importante cuando se trata de una categoría tan reñida como Segunda B.
Además de las expulsiones,
José Juan Romero, míster del filial, lamenta las últimas decisiones que están sufriendo. "Ha habido un penalti de libro, y un balón que ha botado dentro que pudo ser gol", declaró a la finalización de su partido contra el Cartagena.