Derrota importante la sufrida la pasada noche por los
Chicago Bulls, en la que
Pau Gasol y Nikola Mirotic participaron sin que pudieran evitarla ante los
Charlotte Hornets, que tuvieron como espectador de lujo a su dueño, el legendario
Michael Jordan. Los Hornets, con un ataque exterior arrollador, anotaron 14 triples, ganaron por paliza de
130-105 ante unos desconocidos Bulls en su juego defensivo, que no existió, por lo que el nombre de su exentrenador,
Tom Thibodeau, estuvo en boca de muchos durante todo el partido.
Gasol, que fue junto al escolta
Jimmy Butler el único jugador de los Bulls que se salvó del mal partido, tampoco brilló, pero cumplió con 13 tantos en los 23 minutos que disputó. El jugador de
Sant Boi anotó 6 de 11 tiros de campo, falló un intento de triple, y acertó 1 de 2 desde la línea de personal, además de capturar ocho rebotes y repartir tres asistencias.
Mientras,
Mirotic protagonizó el peor partido en lo que va de temporada al aportar sólo cinco puntos tras fallar 9 de los 11 tiros que hizo a canasta, incluidos 4 de 5 triples. Mirotic, que jugó 24 minutos como titular, no fue a la línea de personal, capturó cinco rebotes y repartió dos asistencias.
Mejor le fueron las cosas a los
Grizzlies de Memphis, el equipo del pívot
Marc Gasol, que tras sufrir la peor derrota de su historia la noche anterior frente a los
Golden State Warriors (116-76) llegaron a
Sacramento y ganaron por
89-103 al equipo local de los
Kings. El mediano de los hermanos Gasol no pudo disfrutar al completo del triunfo al tener que abandonar el partido en la segunda parte después de sufrir espasmos en el cuello. El entrenador de los Grizzlies,
David Joerger, consideró que era mejor no arriesgar y decidió darle descanso el resto del partido. Pero antes de retirarse, Marc Gasol aportó ocho puntos al anotar 4 de 8 tiros de campo, capturó dos rebotes, repartió dos asistencias y puso un tapón en los 18 minutos que jugó en la primera parte.