Estadio Deportivo3 min lecturaBarcelona, 31 may (EFE).- El Barcelona volverá a jugársela 48 horas después de que su victoria en Andorra le haya dado un balón de oxígeno y contará con la ventaja del factor cancha frente a un Morabanc Andorra, convertido en la gran revelación del curso.
El equipo de Svetislav Pesic estuvo contra las cuerdas en el Principado. Después de perder con claridad en el Palau Blaugrana en el primer partido (76-94), los de Joan Peñarroya llegaron a dominar por 11 puntos de diferencia en el segundo cuarto (33-21) frente a un rival sin recursos.
La portentosa actuación de Ante Tomic en la pintura y su acierto en los tiros libres resultó determinante, también la actitud del equipo, así como la decisión de Pesic de jugar con una rotación muy corta.
Contó el serbio con siete jugadores, más la ayuda muy puntual de Sanders (6 minutos, 0 puntos, -3 valoración) y de Reynolds (9 minutos, 2 puntos, 0 valoración). Se quedó Juan Carlos Navarro, con problemas físicos, por segundo partido sin jugar.
Buscará el Barça controlar sus emociones y no desaprovechar la oportunidad que se le presenta. "Ahora habrá que ser inteligentes", dijo Pesic tras la victoria en la noche del miércoles.
Para que los azulgranas tengan opciones a la victoria necesitan imponer su defensa y, sobre todo, controlar el rebote, faceta en la que el equipo de Joan Peñarroya le ha superado en los dos primeros partidos de la serie.
Además, necesita Pesic recuperar la mejor versión de Heurtel, que estuvo mejor en el primer partido, pero que en el primero no se pareció al jugador determinante que ha liderado el equipo en toda la temporada.
El Andorra se ha mostrado como un equipo con muchas armas. Muy bien dirigido por Peñarroya, los del Principado son, junto al Baskonia, uno de los mejores equipos en el juego de transición.
Dispone de un gran director de juego como es Albicy, el mejor anotador en el segundo partido (22 puntos), una gran batería de exteriores (Jelinek, Sané, Blazic), y muchos recursos en la pintura con Iverson, Diagne o Shurna.
Y llegados a este punto, el Andorra no tiene nada que perder y está dispuesto a conseguir por primera vez en su historia una clasificación para las semifinales de la liga ACB.
"Tenemos que ser valientes. Llegaremos bien, tenemos que ir al Palau con la idea de que haremos un partido como el último y veremos lo que sucede", dijo Peñarroya tras el partido del miércoles en Andorra.