El equipo de críquet de Sri Lanka regresa a Pakistán tras el ataque de 2009

Islamabad, 29 oct (EFE).- La selección de críquet de Sri Lanka regresó hoy a territorio paquistaní por primera vez desde el ataque terrorista de 2009 en el que resultaron heridos varios de sus jugadores y que supuso el fin de los partidos internacionales de este deporte en Pakistán hasta 2015, tras seis años de sequía. "Estamos listos para daros la bienvenida en el estadio Gaddafi (de la ciudad oriental de Lahore) en este día histórico", afirmó el presidente del Consejo de Críquet de Pakistán (PCB), Najam Sethi, antes del encuentro de hoy. El Gobierno de Pakistán también se enorgullecía de mostrar a través de las redes sociales el regreso de la selección de críquet ceilanesa a su país, un síntoma de los nuevos tiempos, con fotos de la llegada de los jugadores al aeropuerto de Lahore. En una rueda de prensa previa al partido, los mensajes de fraternidad se repetían. "Queremos paz para todos", señaló el presidente de la federación de críquet de Sri Lanka, Thilanga Sumathipa. Por su parte, el capitán de la selección de la antigua Ceilán, Thisara Perera, aprovechó para sincerarse con los asistentes. "Teníamos mucho miedo antes de venir, pero estoy muy satisfecho con la seguridad (...) Doy gracias a la gente de Pakistán porque nos han dado una gran bienvenida", explicó Perera. En mente de todos estaba el ataque terrorista de 2009 contra el convoy de la selección de Sri Lanka en Lahore, que mató a siete policías y dos civiles e hirió a varios de los jugadores. Sumathipa también se reunió con el "héroe" que conducía aquel autobús, Mehar Khalil, en una jornada repleta de recuerdos. Desde aquel ataque el Consejo Internacional de Críquet (ICC) había prohibido los partidos oficiales entre selecciones en Pakistán, lo que obligó al equipo paquistaní a jugar los encuentros en suelo neutral, desplazándose a países como Arabia Saudí. Un proceder que rompieron esporádicamente equipos de países como Zimbabue, que en 2015 disputó el primer partido internacional en Pakistán en seis años. Antes el equipo de Bangladesh había anunciado en 2012 que visitaría Pakistán para jugar una serie de partidos oficiales contra la selección local y romper así la sequía de encuentros internacionales en el país, aunque finalmente canceló el viaje debido a unas medias de seguridad "inapropiadas". Pakistán, considerada una de las potencias criquetísticas, consiguió en 1992 alzarse con la copa del mundo tras enfrentarse en la final contra Inglaterra, en un torneo que se celebró en Australia y Nueva Zelanda y que elevó al panteón del críquet a su estrella Imran Khan, ahora convertido en político. El año pasado, para animar a más selecciones a viajar a suelo paquistaní y "revivir" los encuentros internacionales, el Consejo de Críquet de Pakistán incluso anunció la adquisición de autobuses blindados, una medida que parece haber surgido efecto.