Estadio Deportivo4 min lecturaMontevideo, 13 jul (EFE).- El embajador de Francia en Uruguay, Hugues Moret, conmemoró hoy el primer gol de la historia de la Copa del Mundo, tanto que marcó el futbolista francés Lucient Laurent en el Mundial de 1930, cuando el equipo galo jugaba contra México en Montevideo.
Para celebrar esta diana, que se dio el 13 de julio en el minuto 19 en el Estadio de los Pocitos de Montevideo ante 4.000 espectadores, el diplomático recordó el momento con una patada simbólica a una réplica del balón original usado en el primer mundial de FIFA.
"No he venido aquí para marcar un gol, he venido para conmemorar el primer gol de la primera Copa del Mundo, marcado por un jugador francés en 1930", bromeó Moret desde un monumento que recuerda dónde estaba este histórico arco, ya que hoy el campo se ha transformado es un barrio residencial.
El embajador, además, recordó que Francia también está celebrando el vigésimo aniversario de su victoria en la Copa del Mundo de 1998 y que espera poder festejar dentro de dos días la segunda victoria francesa.
"Como es natural, espero que esta final la gane Francia y que así Francia pueda llevarse, como dicen aquí, su segunda estrella", recalcó.
Por su parte, el encargado del área de cooperación de la embajada de México, Jose Álvaro Domínguez, quien formó parte de este evento conmemorativo pese a que su nación perdió en este partido por 4-1, no se atrevió a predecir quién levantara la Copa del Mundo de 2018.
No obstante, señaló que "festejará con mucho gusto" tanto la victoria de Francia como la de Croacia.
También estuvo presente en este evento organizado por un Consejo Vecinal de la ciudad el arquitecto Eduardo di Mauro, escultor que fue encargado de crear el monumento a la portería.
"Hoy la cancha estaría mezclada con la trama urbana, pero luego de una investigación y un montón de fotomontajes se pudo confirmar que este era el lugar (donde estaba el campo)", explicó a Efe Di Mauro.
No obstante, el experto también detalló que los estudios mostraron que la meta se encontraba unos metros más a la izquierda, pero que se decidió desplazar el monumento a la acera pues según los planos la portería ahora se encontraría "en el salón de una persona".
El Estadio de los Pocitos fue la cancha de Peñarol entre los años de 1921 y 1933, además de haber sido uno de los tres campos donde se disputó el primer Mundial de la historia, junto al mítico Centenario y al Parque Central.
Sin embargo, hacia 1937, la cancha fue desapareciendo paulatinamente debido a importantes proyectos viales que se llevaban a cabo en aquel entonces, y se convirtió en lo que hoy son calles y residencias que integran el céntrico barrio de Pocitos de la capital uruguaya.