Estadio Deportivo5 min lecturaSant Joan Despí (Barcelona), 19 may (EFE).- El entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, le ha dado un "excelente" a la temporada de su equipo, a pesar de reconocer una derrota en cada competición, siendo la de Roma en la Champions, un momento complicado, como así ha reconocido.
Después de una barbacoa con todos los miembros de la plantilla, en que el capitán Andrés Iniesta ha pagado el ágape, el Barcelona ha vuelto a la Ciudad Deportiva para el último entrenamiento de la temporada.
"Mañana contra la Real será un partido en el que habrá celebración, pero habrá que competir contra otro equipo que no se juega nada y que también despide a uno de los suyos (Prieto)", ha señalado Valverde.
A pesar del ambiente distendido que rodea al último choque del curso, este domingo en el Camp Nou (20:45 horas), Valverde desea "cerrar bien el año. Es la despedida de Andrés Iniesta y va a ser un partido importante para el barcelonismo, por lo que significa él y lo que pueda ser en el futuro. Queremos poner un buen punto y final y rendirme un homenaje con una victoria".
La marcha del ahora capitán azulgrana no debe llevar al club, según Valverde, a buscar en el mercado "una réplica, porque no la conseguiremos".
"Tenemos que readaptarnos a otra realidad porque el perfil será diferente, lógicamente. Tenemos a Denis Suárez, Carles Aleñá y Philip Coutinho y entre todos tenemos que buscar soluciones para que el juego vaya redondo y fluya", ha destacado.
Relativo a las dudas en el futuro de Sergio Busquets, aún con contrato pero reclamando un aumento de suelto, Valverde ha subrayado la importancia del azulgrana en el centro del campo del equipo por "el equilibrio que aporta" y, ha añadido, "confío que continúe con nosotros, porque tiene contrato".
Sobre la titularidad de Messi en el partido de este domingo, Valverde ha deslizado que el jugador participó en el partido amistoso en Suráfrica "por contrato" y que en adelante la idea "es que descanse", como hizo contra el Levante.
Cuando se le ha preguntado si ya está en condiciones para poner nota a la temporada, Valverde ha dicho: "Una nota alta porque ha sido una temporada dura y larga y ha habido de todo, también momentos en los que hemos jugado bien. Hemos perdido un partido en cada competición, pero uno que nos hizo mucho daño fue en Roma y que generó inestabilidad. Pero aprendimos y nos levantamos para lograr dos títulos (Liga y Copa)".
"Ha sido una temporada excelente, sobre todo por cómo comenzamos. Todos queremos ganar todo, pero al final también de los problemas hay que ir aprendiendo", ha señalado.
De los cambios de mimbres en el equipo para la próxima temporada, Valverde considera que un grupo campeón como el Barça necesita pocos retoques y que le gustará que existiese perspectivas para que los jóvenes puedan subir al primer equipo, y se ha referido a Riqui Puig (juvenil) y Carles Aleñá (Barça B).
"El futuro pasa por ahí otra vez, aunque se tenga que apuntalar con jugadores de fuera como siempre ha siso. Espero que sus expectativas estén en el Barcelona", ha deseado, a la vez que ha defendido que no le importa en qué categoría esté el filial, porque para él lo importante es que haya "buenos entrenadores en la base".
Valverde quiere una plantilla de 21 jugadores "para que el filial tenga sus oportunidades", y ha asegurado que en el primer equipo "tenemos una base solida en la que confiamos. No va a haber una revolución este verano".
Finalmente, se ha referido al aficionado en el Camp Nou, cuya presencia en el graderío ha ido de menos a más esta temporada. "Cuando nos apoyan y vienen al campo somos más fuertes. Quiero que vengan a participar de lo que ocurre en el campo, más que a ver al equipo. Hay muchas formas de venir al estadio; a disfrutar es importante. Su ayuda se nota mucho", ha sentenciado.