Kono y diez más

Unai escuchó las voces de la inmensa mayoría de sevillistas que le reclamaban suplencia para N´Zonzi y titularidad para Konoplyanka. La paciencia que había demostrado con el primero por fin la tuvo con el segundo. Ajeno hasta hace unos días al talento del ucraniano -cualquier cosa menos un jugador de fútbol sala-, Emery parece que ha estado más pendiente de guardar esa misma banda izquierda a Vitolo para que tenga opciones de ir a la Eurocopa, o de que no se moleste Reyes porque ahora gana bastante menos que Kono.

Prefiero pensar que ha sido estrechez de miras de un entrenador más preocupado de no alterar al vestuario, aun a riesgo de que se marchitara el ´crack´ que tanto sudor ha costado traer y que tantas tardes de gloria puede dar antes de que pueda llevárselo cualquier Mourinho por una millonada. Aparte de eso, poco se le puede discutir al entrenador doble campeón de la Europa League. Aprende rápido y parece que, a la espera de Carriço, ha pasado lo peor. Rami es el jefe atrás y Banega, la fuente de la que todo mana, por lo que aún podemos soñar con un gran Sevilla que aplaste rivales como hizo el sábado.