El príncipe y el restaurador a los mandos

Málaga y Granada han conocido los puestos de descenso hace unas semanas y no quieren repetir experiencia en 2016. El gol de Charles al At. Madrid alivia las fiestas en La Rosaleda, donde ya saben lo que es apretarse el cinturón. El hijo del jeque Al Thani, Nasser, está a los mandos y entre los despidos de 2015 figuran nada menos que el de Husillos y Vicente Casado. Con Arnau como nuevo director deportivo y una mezcla de abogados y auditores dirigiendo el club, a Javi Gracia no le queda otra que la heroica. La pasada temporada el equipo se desinflaba en el tramo decisivo de campeonato y se caía de la carrera europea. Se soñó con las semifinales de Copa y hace semanas ha sido el Mirandés su verdugo en la competición del K.O. Se está pagando la marcha de los Samus, de Juanmi y, finalmente, de Darder el pasado verano. Un desmantelamiento en toda regla al que pocos sobreviven.

Para superviviente Jose Ramón Sandoval, que se llevó las mieles de triunfo donde ni Caparrós ni Abel pudiron sacar adelante el proyecto de Pina en Granada. El restaurador madrileño ganó tres partidos y empató el cuarto ante el At. Madrid, ganándose la salvación. Ahora anda en manos del arrepentido Success y del aún más joven Peñaranda, el futbolista más precoz en hacer gol en toda la historia de la entidad granadinista. Habrá que recordar a Lillo, que seguramente pensó en Sandoval y en Los Cármenes cuando aseguró que el fútbol es un estado de ánimo.