Opinión

La vie en rose

La vie en rose
- Hugo Salázar (05/03/2016)
Hugo SalazarHugo Salazar3 min lectura
No es rosa todo lo que reluce en el Betis, aunque la contundente victoria del equipo en Cornellà-El Prat todo lo tiñe del color de la calma y la serenidad. El rosa se viste hoy en Villamarín de camiseta, se viste de mujer siempre, de mujer bella con los colores verde y rosa por bandera. Bandera que hoy ondeará a media asta por la pérdida de un gran comunicador y un gran bético, Fernando Carrasco. A veces Dios esculpe la vida de manera caprichosa.

Este Betis por el que nadie daba un chavo, yo el primero, se sacude momentáneamente la presión que le acorralaba en el callejón de las dudas. Llama la atención sobremanera la celebración del tremendo gol de Vargas; jugadores de campo, banquillo, técnicos, utilleros y doctores haciendo una piña en la banda. Jugadores enchufados, éxito casi asegurado. Eso gusta verlo.

Hoy frente al Granada el Betis debe espantar esa leyenda negra que le persigue: después de una muy buena actuación siempre llega una gran decepción. Extirpen el miedo y den ese paso al frente para alegría y tranquilidad de la afición. Estos tres puntos catapultarían al equipo a la zona templada. Ahí todo es más sencillo; se puede trabajar, se puede pensar, se puede planificar y hasta te permite tropezar. La mano del entrenador ya es una realidad. Él está con los jugadores y los jugadores están con él. Comunión perfecta.

Hoy el rosa todo lo puede. Acalla hasta las críticas a semejante gesto. Gesto que el resto del país aplaudirá pero que aquí tristemente algunos reprueban. Una pena. Pero es que el Betis es como ese gato al que muchos insisten en buscarle tres pies, aunque recordemos que esta entidad no tiene precisamente siete vidas. Por eso las críticas que hagan crecer al Betis deben de ser bien encajadas y bien recibidas. Esas ayudan. Pero aquellas propagandistas que llevan el sello del propio interés desprenden un tufo que se siente a leguas.

La vida en rosa según el Betis. Algunos podrían confundir esta expresión con todos los episodios que esta entidad y su entorno a veces proyectan, como si de la prensa rosa o la crónica social se tratase, esas que salen en el papel cuché. Pero de lo que realmente se trata es de un merecido homenaje a la mujer bética. La vida en rosa según el Betis, al menos hasta las doce de la mañana de hoy domingo. Luego Dios dirá.
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