Por la mañana sale el sol (Opinión)

La caída

La caída
Eduardo GilEduardo Gil2 min lectura
Como cantaba Paloma San Basilio, la fiesta terminó. Mucho ha tardado porque había síntomas que daban olor desde la Copa Confederaciones de 2013. Ocho años y cuatro días de aquel penalti de Cesc que nos llevó a cuartos un 23 de junio de 2008. Toca fin de ciclo. Ya ni a cuartos, cuando pensábamos que nos habían vacunado contra este tipo de deja vú. Otro día de la marmota a almacenar en lo más profundo de nuestra memoria de decepciones. Recuperamos esa maldita costumbre. Y es que eso pasa por querer vivir de las rentas. La cohorte de palmeros que rodea a la 'Roja' apostaba por no tocar nada y la selección lleva con el piloto automático demasiado tiempo.

Prima la comodidad de los jugadores y así pasa lo que pasa, que nos pintan la cara. El entusiasmo y la intensidad italianas eran muy reveladores: Conte había trabajado el partido a conciencia. Del Bosque no aportó alternativas, la estrategia siempre al segundo palo, nulo juego por bandas, no han venido los jugadores más en forma sino los que estaban fundidos. A este paso, el desagradecido Pedrito sólo fue un poco inoportuno. Pero ni rotando ante Croacia habría habido solución. Casi mejor cortar por la sano porque los alemanes ya le metieron siete a Brasil. En media Europa se rifan a nuestros entrenadores, pero en España nos empeñamos en mantener el patrón Miguel Muñoz. Por eso se me hace más dura la caída.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram