Opinión

Más nervios en el banco que en la grada

Más nervios en el banco que en la grada
- Fernando Mateos
Fernando MateosFernando Mateos 1 min lectura
Se quejaba Gustavo Poyet en la previa del "nerviosismo" de la afición tras el mal partido de los suyos en Barcelona. A priori, podía entenderse su sorpresa, ya que caer ante el Barça, un equipo que se gasta 13 kilos en un portero suplente, tiene que entrar dentro de lo normal. Pero ayer era el Deportivo el que estaba enfrente. Un equipo de la liga del Betis.

Y lo cierto es que no se vio nada distinto a lo de la pasada campaña. Sólo es la segunda jornada y, por tanto, era de nuevo normal que el técnico uruguayo volviera a pedir tranquilidad en la sala de prensa, pero lo cierto es que fue él mismo, esquivo con los medios, quien exhibió ese nerviosismo que le recrimina a su afición. Lo demostró al achacar exclusivamente a la falta de gol el discreto juego de los suyos o al no querer hablar de los pitos de una grada que muchas veces ha pecado de poco exigente y que no está dispuesta a dejar pasar ninguna más.
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